MADRID 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Líbano, Michel Suleiman, ha criticado este jueves la presencia del partido-milicia chií Hezbolá en Siria y ha sostenido que "no existe la independencia cuando algunas facciones libanesas se saltan el consenso nacional, ponen en riesgo la estabilidad de Líbano, y participan en los combates registrados en el marco de una guerra en un país vecino".
En un discurso pronunciado en la víspera del Día de la Independencia Libanesa, que se celebra este viernes y que conmemora el fin del mandato francés sobre el territorio el 22 de noviembre de 1943 tras la ocupación de Francia por parte de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial, Suleiman ha recalcado que "tampoco hay independencia si las fuerzas de seguridad no son las únicas autorizadas a portar armas", en referencia al arsenal que controlan varias milicias presentes en el país.
Así, ha indicado que la crisis que atraviesa el país y la paralización de las instituciones estatales "ponen en duda el significado de la independencia, de las prácticas democráticas, y del sistema libanés, así como el hecho de si realmente sirven los intereses nacionales".
Por ello, Suleiman ha pedido a los líderes de los diversos partidos que no permitan el vacío de poder en las instituciones, al tiempo que ha abogado por la celebración de las elecciones presidenciales tal y como está previsto. Su mandato expira en mayo de 2014 y, pese a la falta de acuerdo sobre su sustituto, ya ha anunciado que no tiene intención de extender su periodo en el poder.
"Los próximos meses no han de ser una pérdida de tiempo, sino una oportunidad para alcanzar un consenso sobre la legislación electoral, sobre la retirada (de Hezbolá) de Siria, sobre el inicio del diálogo nacional, la implementación de la descentralización administrativa, y la creación de un comité para localizar a los desaparecidos durante la guerra", ha valorado.
"Subrayamos nuestra unidad nacional y coexistencia religiosa. Pido a todos los partidos que contribuyan a construir el Estado justo y capaz que las jóvenes generaciones aspiran a lograr", ha remachado, según ha informado el diario libanés 'An Nahar'.
La participación de Hezbolá en el conflicto sirio del lado de las fuerzas gubernamentales ha provocado múltiples críticas por parte de la coalición opositora Movimiento 14 de Marzo y gran parte de Occidente. Asimismo, se ha vinculado a ella el incremento de atentados en territorio libanés, el último de los cuales tuvo como objetivo la Embajada de Irán, también aliado del presidente sirio, Bashar al Assad.
El partido-milicia ha mantenido durante el conflicto en Siria su apoyo a Al Assad y ha abogado públicamente por la resolución política del conflicto y por la introducción de reformas democráticas en el país.
Sin embargo, en los últimos meses ha participado junto a las fuerzas de seguridad sirias en varios combates contra grupos opositores armados, especialmente en la localidad de Qusair, ubicada cerca de la frontera común y en los alrededores de Damasco y Alepo. En dichos enfrentamientos, el papel de Hezbolá fue fundamental para que el Ejército recuperara el control de la ciudad.
La intervención del grupo en el conflicto supuso una violación de la Declaración de Baabda, firmada por todas los partidos políticos del país, que estipula la neutralidad de Líbano ante los eventos en la región, limitando su papel al control de la frontera y el tráfico de armas y combatientes.