MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, ha anunciado que su Gobierno responderá al rechazo del Tribunal Supremo al plan para deportar migrantes a Ruanda con una ley de "emergencia" que permita confirmar que el país africano es "seguro" y que, por tanto, los traslados son legales.
Londres considera que la sentencia conocida este miércoles no declara ilegales este tipo de acuerdos, pero sí asume que este caso concreto puede generar dudas, entre otras razones por las circunstancias del país contemplado como destino. Los jueces han expresado también su temor a que los migrantes puedan terminar siendo trasladados a los países de los que huyeron en un inicio.
"El Tribunal Supremo ha confirmado que el envío de solicitantes de asilo a terceros países es legal", ha zanjado Sunak, en una comparecencia ante los medios después de todo un día de explicaciones, con declaraciones también en la Cámara de los Comunes. El primer ministro ha hablado además con el presidente ruandés, Paul Kagame, para confirmar que no cejará en su empeño.
Con el objetivo de conservar una de sus iniciativas estrellas, ha abogado por reformar las leyes para que no haya ningún tipo de recelo legal o judicial hacia Ruanda. "Estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para que despeguen los vuelos", ha añadido, después de que en junio una intervención 'in extremis' del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) paralizase el primer traslado.
En previsión de que el TEDH pueda pronunciarse sobre futuros recursos, Sunak ha abogado por cambiar las leyes y evitar cualquier posible rechazo futuro a sus políticas: "No permitiré que un tribunal extranjero bloquee los vuelos".
Sunak, que ha abogado por reducir la llegada de inmigrantes a Reino Unido y ha fijado de nuevo como "prioridad" frenar el flujo en el canal de la Mancha, ha admitido que la sentencia de este miércoles puede haber supuesto frustración en algunos sectores, pero ha llamado a tener paciencia, después de que también en el seno del Partido Conservador hayan arreciado las críticas.
De hecho, el dictamen llega en la misma semana de una crisis de Gobierno que ha supuesto la salida de la responsable de Interior, Suella Braverman, una de las voces más beligerantes en relación a la inmigración y que ha cargado públicamente contra Sunak entre otras razones por no ser suficientemente firme en la materia y no plantear un claro "plan B" antes del pronunciamiento del Supremo.
"Creo que el sistema actual es injusto e insostenible" ha asumido el 'premier', al que comienzan ya a poner en entredicho personalidades del ala 'tory' más dura. Sunak ha defendido que el tránsito de embarcaciones en el canal de la Mancha ha descendido este año, en el que también han sido deportados "más de 20.000 migrantes ilegales".