BRUSELAS, 27 (EUROPA PRESS)
El primer ministro británico, Rishi Sunak, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reúnen esta tarde para asumir las "conversaciones finales" para tratar de cerrar un acuerdo que permita desbloquear la aplicación del protocolo para Irlanda e Irlanda del Norte, negociado como parte de los pactos del Brexit pero que Londres se niega a cumplir desde la fecha en que debió entrar en vigor.
La reunión entre ambos en el condado de Berkshire (este de Londres) fue anunciada la víspera en un comunicado conjunto de la Comisión Europea y el Gobierno británico en el que se precisaba que el objetivo era "seguir trabajando" para dar con "soluciones prácticas" a las cuestiones más complejas del protocolo.
Desde Bruselas se resisten a hablar del posible acuerdo, pero un portavoz de Downing Street citado por medios británicos ha precisado que se trata de las "conversaciones finales" y está prevista una rueda de prensa de ambos al término de su encuentro. También el vice primer ministro británico, Dominic Raab, dijo el domingo a la cadena BBC que se habían logrado "grandes avances".
Von der Leyen, además, será recibida más tarde por el rey Carlos III, según ha informado en una rueda de prensa en Bruselas la portavoz de la jefa del Ejecutivo comunitario, Dana Spinant. La portavoz, no obstante, ha querido recalcar que el encuentro con el monarca británico "no forma parte del proceso" de negociación del protocolo.
Una vez concluya la reunión entre Sunak y Von der Leyen, el 'premier' tiene pendiente comparecer ante la Cámara de los Comunes para exponer los detalles del acuerdo, si éste se confirma; mientras que el vicepresidente de la Comisión Europea responsable de las negociaciones por el lado de la UE, Maros Sefcovic, se verá con los embajadores de los países de la UE en Bruselas para informarles del resultado de los contactos.
Tras dos años de desencuentros entre la Unión Europea y los anteriores gobiernos británicos para desbloquear esta crisis, el relevo que tomó Sunak de Boris Johnson al frente de Downing Street a finales de pasado año permitió el acercamiento entre Londres y Bruselas y la reactivación de las negociaciones para consensuar "soluciones pragmáticas".
Como parte de las condiciones del Brexit, la Unión Europea y el Gobierno británico acordaron que a partir de la ruptura deberían realizarse una serie de controles e imponer otras condiciones al paso de mercancías desde el resto de Gran Bretaña a la provincia norirlandesa, con el objetivo de que Irlanda del Norte pudiera seguir siendo parte del Mercado Único sin reintroducir una frontera vigilada en el Úlster.