BRASILIA, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Supremo Federal (TSF) ha paralizado este martes el procedimiento diseñado por el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, para impulsar el juicio político ('impeachment') contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
El TSF ha acogido así las demandas de los diputados oficialistas contra la 'hoja de ruta' ideada por Cunha para juzgar a Rousseff al considerar que, si bien corresponde al presidente de la Cámara de Diputados la decisión, los pasos a seguir están fijados en la Constitución.
"Un proceso de tamaña magnitud institucional, que lleva a juicio al más alto cargo del Estado, debe seguir el debido proceso", ha esgrimido Zavascki, en declaraciones recogidas por los medios de comunicación brasileños.
Cunha pretendía formar una comisión dominada por la oposición para que examinara la petición de celebrar un juicio político contra Rousseff, lo que prácticamente determinaría el resultado, mientras que el oficialismo argumenta que la composición debe ser proporcional.
"La ley dice que la comisión especial que debe decidir, en el caso de que el presidente de la Cámara de Diputados lo considere oportuno, estará compuesta proporcionalmente por los representantes de los partidos políticos", ha esgrimido el legislador oficialista Wadih Damous.
Cunha, por su parte, ha restado importancia a la decisión del TSF. "Mi prerrogativa constitucional (de decidir sobre el 'impeachment') no está en cuestión. Solamente se ha tratado el futuro proceso", ha dicho en declaraciones a la prensa.
Además, ha adelantado que pretende decidir este martes sobre las peticiones de juicio política que tiene en sus manos, al tiempo que ha explicado que la que ha recibido hoy de manos del ex 'petista' Helio Bicudo y del jurista Miguel Reale tendrá que esperar.
Ésta última es la petición con más posibilidades de éxito. Se basa en los ajustes que hizo el Gobierno en las cuentas públicas sometidas a examen institucional que, según el Palacio de Planalto, es una práctica muy habitual.
Las otras peticiones --hasta una decena-- se basan también en la supuesta responsabilidad de Rousseff en la trama de sobornos para la concesión de contratos públicos de Petrobras por no darse cuenta de lo que estaba pasando.
Si Cunha da trámite a alguna de estas solicitudes, se formará una comisión parlamentaria para ratificar o rechazar la decisión del presidente de la Cámara de Diputados. El dictamen se someterá a votación en el pleno, donde serán necesarios al menos dos tercios para enjuiciar a Rousseff.
De momento, la líder izquierdista cuenta con los votos suficientes para parar las pretensiones de la oposición. La reciente reforma del Gobierno va encaminada, precisamente, a dar más presencia a los partidos aliados para garantizar el apoyo en el Congreso.