BANGKOK 25 Jul. (Reuters/EP) -
El Ministerio de Justicia de Tailandia ha congelado este lunes varias cuentas bancarias de la exprimera ministra Yingluck Shinawatra en el marco de una serie de medidas administrativas impuestas contra la ex dirigente en compensación por las pérdidas provocadas por su programa de subsidios al arroz.
La ex mandataria tailandesa, que ha presentado un recurso para revocar la congelación de sus cuentas, ha señalado que la decisión de la junta militar de Tailandia es ilegal e injusta.
Yingluck, que fue la primera mujer que ejerció como primera ministra del país, ha sido acusada por la Fiscalía de cargos de negligencia por la puesta en marcha del sistema de compra de arroz a los agricultores, un programa que la junta militar que gobierna el país desde el golpe de Estado de mayo de 2014 calcula que ha supuesto pérdidas por valor de unos 16.000 millones de dólares (14.257 millones de euros).
El secretario permanente del Ministerio de Finanzas, Somchai Sujjapongse, ha indicado que las diferentes comisiones del Gobierno a cargo de la investigación sobre el caso de los subsidios al arroz han presentado los datos necesarios sobre doce cuentas bancarias de Yingluck.
El programa de compra de arroz establecía la adquisición de las cosechas de este cereal por encima del precio de mercado, lo que contribuyó a una clara victoria por parte de Yingluck en las elecciones de 2011.
Los seguidores de Yingluck han acusado a la Justicia de ser parciales en sus fallos contra la exprimera ministra, así como contra varios miembros de la familia Shinawatra.
A finales de 2016, la junta militar reclamó a Yinglusk el pago de 35 millones de baht (unos 913.700 euros) en compensación por las pérdidas devenidas del programa de subsidios, un año después de que ésta fuera retirada de la política debido a la mala gestión del programa.
El Tribunal Supremo de Justicia de Tailandia emitirá su veredicto el 25 de agosto. La exprimera ministra, que ha asegurado que el caso tiene un trasfondo puramente político, podría enfrentarse a una pena de hasta diez años de prisión si es hallada culpable.
La rivalidad entre los militares, defensores de la monarquía, y la familia Shinawatra, especialmente con Thaksin Shinawatra, que también fue derrocado por un golpe de Estado en 2006, ha estado en el centro de la crisis política que lleva sufriendo el país desde hace una década.