El ministro de Exteriores afgano asevera que atacar a mujeres y niños no demuestra "ni coraje ni valentía"
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Los autoridades instauradas por los talibán tras hacerse con el control de Afganistán en agosto de 2021 han cifrado en más de 50 los muertos por los bombardeos perpetrados esta semana por parte del Ejército de Pakistán la provincia afgana de Paktika contra supuestos integrantes del grupo armado Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocidos como los talibán paquistaníes.
"Según lo que hemos observado en el lugar de los hechos y las conversaciones con los residentes, tenemos información sobre 51 o 52 muertos y alrededor de 40 heridos, así como cuatro o cinco viviendas destruidas", ha explicado el ministro en funciones de Fronteras y Asuntos Tribales, Norulá Nuri, que ha visitado el distrito de Barmal.
Según ha asegurado en declaraciones recogidas por la cadena de televisión afgana Tolo News, todas las víctimas de este incidente eran civiles, puesto que eran refugiados. Es por ello que ha advertido de que, cuando las investigaciones terminen, "las acciones de Pakistán no quedarán sin respuesta".
Además, el ministro de Exteriores en funciones, Amir Kan Mutaqqi, ha manifestado que atacar a mujeres y niños no demuestra "ni coraje ni valentía", por lo que ha pedido al Gobierno de su país vecino que adopte una política mesurada hacia su territorio.
"Enviamos este mensaje a los funcionarios de Pakistán: no es ningún logro matar a niños. Habéis matado a mujeres y ancianos, y destruido sus hogares. Esto no es ni coraje ni valentía. Incluso los habitantes de Waziristán se han convertido en refugiados por vuestra culpa", ha declarado.
Horas antes, el portavoz del Ministerio de Exteriores paquistaní, Mumtaz Zahra Baloch, confirmó su responsabilidad y aseguró que es una respuesta a "las amenazas a la seguridad de los ciudadanos paquistaníes", si bien Islamabad "siempre ha priorizado el diálogo e los asuntos relativos a los lazos con Afganistán".
Por su parte, la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) ha señalado que ha recibido informes "creíbles" de que decenas de civiles, incluidos mujeres y niños, han muerto en los ataques aéreos paquistaníes perpetrados el 24 de diciembre, por lo que ha instado a llevar a cabo una investigación para garantizar la rendición de cuentas, evitar que se repitan los hechos y defender los derechos de las víctimas.
"El Derecho Internacional obliga a las fuerzas militares a tomar las precauciones necesarias para evitar daños a civiles, incluida la distinción entre civiles y combatientes en las operaciones", reza un comunicado publicado en su perfil de la red social X.
Las autoridades paquistaníes se han mostrado muy críticas por los talibán por lo que consideran una inacción ante TTP y sus continuados atentados en Pakistán, motivo por el que habían amenazado en varias ocasiones con llevar a cabo operaciones transfronterizas si Kabul no actuaba con dureza contra el grupo terrorista.
El grupo TTP, que difiere de los talibán afganos en asuntos organizativos pero sigue la misma interpretación rigorista del islam suní, aglutina a más de una docena de grupos de militantes islamistas que operan en Pakistán, donde han matado a unas 70.000 personas en dos décadas de violencia.
EJÉRCITO Y GOBIERNO DE PAKISTÁN INSISTEN EN QUE KABUL COBIJA AL TTP
En una rueda de prensa este mismo viernes, el Ejército de Pakistán ha insistido en que los talibán afganos proporcionan al TTP cobijo y seguridad para planificar sus ataques transfronterizos.
"Todas las pruebas relacionadas con el terrorismo se pueden rastrear hasta los refugios seguros de los que disfrutan los terroristas en Afganistán", ha explicado el portavoz del Ejército, el teniente general Ahmed Chaudhry.
"Pakistán no escatimará esfuerzos para eliminar las redes terroristas y mantener a nuestros ciudadanos a salvo", ha añadido en sus declaraciones, recogidas por el diario paquistaní 'Dawn'.
"Todo el mundo sabe que Pakistán ha intentado con todas sus fuerzas mantener la paz en Afganistán y que este país ha desempeñado un papel destacado en la estabilidad de Afganistán", ha hecho saber.
También el primer ministro del país, Shebhaz Sharif, ha responsabilizado directamente al Gobierno de Kabul. "La doble política de dialogar con nosotros mientras permiten que el TTP actúe en Pakistán no es factible", ha asegurado durante un encuentro con el Consejo de Ministros.
"Hemos transmitido al Gobierno afgano que deseamos tener buenas relaciones con ellos, pero se debe impedir que el TTP mate a nuestra gente inocente. Esto es una línea roja. Que el TTP siga operando desde allí contra Pakistán es inaceptable", ha recalcado.