MADRID 12 May. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio para los Refugiados del movimiento integrista talibán ha confirmado que al menos 315 personas han muerto y 1.630 han resultado heridas en la serie de inundaciones que han azotado durante los últimos días varias provincias de Afganistán, en particular la de Baglán, en el norte.
Las autoridades han avisado de que la cifra de fallecidos va a aumentar con casi total seguridad en las próximas horas porque el número de muertos actual solo se refiere a los registrados en Baglán, donde además unos 665 domicilios han quedado totalmente destruidos por la crecida de las aguas.
Todavía hay que verificar el resto de fallecidos en otras provincias afectadas del país, como Tajar, cuyo departamento local de emergencia aventuró ayer que al menos 20 personas podrían haber fallecido en la zona aunque no se atrevió a confirmar esta estimación.
El Ministerio de Aviación Civil y Transporte ha avisado de nuevas lluvias torrenciales este domingo en ocho de las 34 provincias del país, las de Badajshán, Tajar, Panjshir, Nuristán, Laghman, Kunar, Nangarhar y la propia Baglán, donde espera que las precipitaciones oscilen entre 15 y 25 milímetros.
El viceprimer ministro del país, Abdul Ghani Baradar Ajund, ha viajado a Baglán este domingo para mantener una reunión de emergencia convocó una reunión con funcionarios provinciales, equipos de rescate y representantes de organizaciones humanitarias, mientras países como Irán o Pakistán, así como Naciones Unidas o la Organización para la Cooperación Islámica, han ofrecido su ayuda y están coordinando operaciones de suministro para atender a los miles de afectados.