Tanzania suspende los programas de prevención del VIH para los homosexuales

DAR ES SALAAM 31 Oct. (Thompson Reuters Foundation/EP) -

Tanzania ha suspendido sus programas de prevención del virus VIH para hombres homosexuales, según ha anunciado este lunes el ministro de Salud tanzano, Ummy Mwalimu, una medida que forma parte de la campaña del Gobierno contra las prácticas homosexuales.

El ministro de Salud ha declarado que el Gobierno ha recibido varios informes, según los cuales varias ONG están promoviendo y normalizando las relaciones entre personas del mismo sexo como parte de los programas estatales de prevención del VIH. La homosexualidad en Tanzania es ilegal y está castigada con hasta tres años en prisión.

El pasado mes de septiembre, el Gobierno amenazó con prohibir a todas las organizaciones de derechos civiles que "promuevan" los derechos de la comunidad LGTB (Lesbianas, gays, bisexuales y transexuales). Fue la primera vez que el Gobierno criticaba públicamente a este colectivo.

"Hemos suspendido todas las intervenciones relacionadas con el colectivo MSM (Hombres que tienen relaciones con Hombres, en inglés)", ha explicado Mwalimu. El ministro ha aclarado que su Gobierno continuará proporcionando servicios de prevención a jóvenes adolescentes, consumidores de drogas y otros grupos de riesgo.

Tanzania tiene fama de ser uno de los países africanos más tolerantes en relación la comunidad LGTB, sobre todo en comparación con su vecino, Uganda. No obstante, la campaña que ha estado llevando a cabo en los últimos meses el Gobierno contra este colectivo ha provocado numerosas condenas por parte de ONG y activistas.

Hay alrededor de un millón y medio de personas con VIH en Tanzania, lo que supone un cinco por ciento de la población. La prevalencia del virus es mucho más alta en los hombres homosexuales, con un 25 por ciento.

John Kashika, miembro de la ONG Servicios de Salud, Educación y Asistencia Legal para la Comunidad, ha denunciado que suspender los programas de prevención de sida para el colectivo LGTB supone un duro golpe en la lucha contra el virus. "Es esencialmente negar los servicios a aquellos que tienen el mayor riesgo de contraer el VIH", ha criticado.