BRASILIA, 7 Nov. (Reuters/EP) -
El presidente de Brasil, Michel Temer, ha asegurado este lunes que trabajará para conseguir la aprobación de la reforma de las pensiones, incluso en caso de que finalmente el proyecto sea menos ambicioso de lo que propuso en un principio.
En un encuentro con líderes del Congreso, Temer ha criticado a algunos políticos por intentar lograr su cese apoyando los cargos por corrupción contra él, argumentando que esto ha aplazado la aprobación de la reforma.
Por su parte, el presidente de la cámara baja del Congreso, Rodrigo Maia, ha indicado que la reforma podría ser aprobada en un plazo de cuatro semanas, si bien ha dicho que para ello Temer debería renegociar su relación con sus bases en el Congreso.
En este sentido, ha recalcado que para conseguir que sea aprobada debe abordar la edad de jubilación mínima e introducir cambios en los beneficios que reciben los funcionarios.
La reestructuración a las pensiones es crucial para los intentos de Temer de cubrir el déficit fiscal y reducir el inflado sistema de pensiones, pero la idea de aumentar la edad de jubilación ha hecho que este proyecto sea impopular entre los brasileños.
Temer afirmó en octubre que el Gobierno está considerando una versión más diluida del proyecto de ley, confirmando declaraciones previas de funcionarios de que se presentaría un plan que al menos establezca una edad mínima de jubilación de 65 años para los hombres, por encima del margen actual de 55 años.
Una nueva versión del proyecto de ley también debería incluir una transición gradual a las nuevas disposiciones y paridad entre los sistemas de pensiones públicos y privados.