NUEVA YORK, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un testigo de la fuerte explosión registrada este domingo en una central eléctrica de ciclo combinado de la ciudad de Middletown, en Connecticut, asegura que "hay cuerpos por tadas partes" en declaraciones publicadas por el diario local 'Hartford Courant'. Sin embargo, oficialmente Policía y Bomberos sólo han informado de dos muertos y de más de un centenar de heridos. El personal sanitario desplazado al lugar del incidente informó de que cuatro de los heridos se encuentran en estado crítico.
Otro testigo presencial indicó que muchas de las víctimas se encuentran aún bajo los escombros generados por la explosión. Y otro individuo asegura que la explosión ocurrió justo cuando se activó el sistema de generación de la central para realizar una prueba.
Los aproximadamente cien bomberos desplazados hasta la planta declararon extinguido el incendio sobre las 13.30 horas y las autoridades sostienen que ya no existe ningún riesgo.
El incidente ocurrió sobre las 11.00 horas de este domingo (17.00 hora peninsular española) cuando reventó una de las tuberías de gas de la central. La enorme deflagración fue confundida por un terremoto por vecinos que viven a más de 16 kilómetros de la planta.
El subjefe de los Bomberos de Middletown, Al Santostefano, indicó que hay "muertes confirmadas", pero no pudo precisar más. Además, destacó que en el momento de la explosión había al menos 50 obreros de la construcción trabajando allí, además de los cien operarios que trabajan habitualmente en la central.
"Fue una gran explosión", dijo y matizó que se trata de un tipo de explosión relacionada de alguna forma con el gas natural, aunque dijo no saber cómo exactamente. "Es posible que haya gente atrapada bajo los restos. Hay mucho acero, por lo que pude ver", explicó.
Al menos veinte de ambulancias, camiones de bomberos y al menos un helicóptero se encuentran ya en el lugar, desde el que surge una columna de humo que puede verse a kilómetros de distancia. La intensidad de la explosión podría atribuirse a las grandes cantidades de gas almacenadas en las instalaciones.
Un vecino de East Hampton cuya casa se encuentra al otro lado del río donde se sitúa la central de ciclo combinado explicó que primero escuchó una fuerte explosión sobre las 11.00 y que inmediatamente después su casa recibió el impacto de una onda expansiva que le hizo pensar que alguien había estrellado un coche contra su casa.
Desde esa misma orilla del río otro testigo indicó que la central ha quedado prácticamente arrasada.