MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, ha pedido este viernes a China y Rusia que "adopten acciones directas por su cuenta contra Corea del Norte, después del último lanzamiento de un misil por parte de Pyongyang
"China y Rusia deben indicar su intolerancia a estos imprudentes lanzamientos de misiles adoptando acciones directas por su cuenta", ha dicho en un comunicado, en el que ha pedido "a todas las naciones" que "tomen nuevas medidas" contra el país asiático.
"Estas continuadas provocaciones sólo profundizan el aislamiento diplomático y económico de Corea del Norte", ha remachado, según ha informado la cadena de televisión estadounidense CNBC.
El proyectil ha sobrevolado territorio japonés y ha impactado cerca de 2.000 kilómetros al este de la isla de Hokkaido. Tokio ha afirmado que no hay informaciones sobre daños en el país.
En este sentido, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, ha subrayado que el lanzamiento "ha puesto a millones de japoneses a cubierto", tal y como ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.
"Acabamos de terminar las llamadas que siempre hacemos para coordinarnos. Tan rápido como es posible", ha añadido, en referencia a los contactos entre Washington, Japón y Corea del Sur.
El portavoz del Mando Estadounidense del Pacífico, Dave Benham, ha indicado que el proyectil disparado sería un misil balístico de alcance intermedio, agregando que no supuso una amenaza para Guam.
El lanzamiento ha tenido lugar un día después de que Corea del Norte amenazara con "hundir" Japón y reducir Estados Unidos a "cenizas y oscuridad" por apoyar la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que impuso nuevas sanciones a Pyongyang por su último ensayo nuclear.
"Las cuatro islas del archipiélago (de Japón) deben ser hundidas en el mar por la bomba nuclear del Juche. Ya no es necesario que Japón siga existiendo a nuestro lado", dijo el Comité para la Paz en Asia-Pacífico de Corea del Norte.
Asimismo, prometió "reducir el territorio continental estadounidense a cenizas y oscuridad". "Descarguemos nuestro rencor con la movilización de todos los medios de represalia preparados hasta ahora", señaló.
El comunicado tildó además a Corea del Sur de "traidores y perros" de Estados Unidos y pidió la disolución del Consejo de Seguridad de la ONU, argumentando que es "una herramienta del mal" integrada por países "sobornados" que actúan según las órdenes de Washington.
La reacción de Pyongyang llegó en respuesta a la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU de aprobar por unanimidad imponer a Corea del Norte el paquete de sanciones más duro contra el país hasta la fecha.
Corea del Norte ha llevado a cabo en los últimos años numerosas pruebas nucleares y balísticas --la última de ellas un ensayo nuclear el 3 de septiembre-- que se han traducido en un endurecimiento del régimen de sanciones internacionales, lo que no ha servido para disuadir a Kim Jong Un.
Las autoridades norcoreanas justifican su escalada nuclear y militar por la necesidad de defenderse de lo que considera movimientos provocadores de Corea del Sur y Estados Unidos.
Las dos Coreas siguen técnicamente en guerra porque solamente firmaron un armisticio para cesar indefinidamente las hostilidades después de enfrentarse entre 1950 y 1953.