BUENOS AIRES 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Argentina, Héctor Timerman, ha presentado su "renuncia indeclinable" como miembro de la AMIA por obstaculizar la investigación judicial del atentado perpetrado contra la sede judía el 18 de julio de 1994, que dejó 85 muertos y 300 heridos.
Timerman ha anunciado su salida de la AMIA en una carta de tres folios enviada a su presidente, Leonardo Jmelnitzky, que se basa en "la certeza de que, con su accionar obstruccionista, continúa impidiendo el avance de la investigación del criminal atentado terrorista".
El jefe de la diplomacia argentina ha argumentado que la AMIA intenta "mantener la denuncia contra los sospechosos y al mismo tiempo boicotear toda posibilidad de iniciar el juicio comenzando con obstaculizar los instrumentos de cooperación judicial acordados con Irán".
Como ejemplo, ha mencionado "una construcción tan llamativa como que el propio fiscal Alberto Nisman, que proveyó las pruebas contra los sospechosos, fuese quien lideró junto a los dirigentes comunitarios la intensa campaña contra el instrumento legal que superaba los impedimentos constitucionales que frenaban avanzar con el juicio".
Timerman ha criticado igualmente que la AMIA "haya vuelto a caer en la vulgar acusación que todo judío que critica su accionar, y no son pocos, sea tildados con el gastado argumento de ser 'judíos vergonzantes'".
"Deberían recordar que el primer judío en ser acusado de tal forma fue Teodoro Herzl, padre fundador del sionismo moderno, en 1898 cuando fue denunciado por Karl Strauss de odiar tanto a los judíos que quería erradicarlos de Europa", ha señalado.
AMENAZA ENCUBIERTA
Timerman ha subrayado que "no alcanza con organizar actos una vez por año" y "menos con invitar a oradores sinvergüenzas que se arrogan el derecho de definir traidores y leales, si al mismo tiempo la dirigencia comunitaria impide que avance la causa judicial".
Además, ha recordado que "ya hay un ex presidente de la DAIA procesado por encubrimiento del atentado", advirtiendo de que llegará el momento en que otros líderes judíos "deban rendir cuentas por su accionar ante la justicia, la historia y las víctimas".
"Cuando ello ocurra no quiero que aleguen que hablaron en nombre mío, por eso renuncio como miembro de una organización de la cual supimos estar orgullosos y hoy nos avergüenza", ha explicado el ministro de Exteriores.
CAMPAÑAS MEDIÁTICAS
También ha acusado a la asociación hebrea de "alimentar las campañas de quienes pretenden usar dicha tragedia para fines contrarios a los intereses nacionales, tanto políticos como económicos y sociales", según ha informado la agencia de noticias Télam.
El canciller argentino ha considerado inaceptable que "la injusta muerte" de las víctimas de la AMIA "se convierta en una pieza de ajedrez de los intereses geopolíticos de otros países o de grupos partidarios locales".
"No se puede permitir que la memoria de los muertos sea utilizada como herramienta de presión de los fondos buitres como hacen con la intensa campaña montada en Estados Unidos", ha añadido, recordando que dos años antes de que Nisman presentara su "canallesca denuncia", los "fondos buitres" denunciaban el "pacto espurio entre Argentina e Irán".
Timerman ha aludido al Memorándum de Entendimiento (MOE) suscrito por Buenos Aires y Teherán para destrabar la causa judicial y que, según Nisman, pretendía todo lo contrario: evitar un proceso contra los sospechosos iraníes a cambio de la compra de granos argentinos.