MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Frente Popular para la Liberación de Tigray (TPLF) ha denunciado este martes un nuevo ataque con drones contra desplazados internos en la región de Tigray y ha resaltado que "decenas de niños y ancianos" han muerto en el bombardeo, sin que Adís Abeba se haya pronunciado al respecto.
El portavoz del TPLF, Getachew Reda, ha denunciado que "las fuerzas aéreas de (el primer ministro etíope) Abiy Ahmed y el presidente eritreo) Isaias (Afewerki) han llevado a cabo hoy un horrible ataque con drones en Adi Daero".
Asím ha manifestado que "lo que es particularmente indignante es que las víctimas habían estado previamente en refugios en Adiyabo" y ha agregado que "se vieron forzadas de nuevo a abandonar sus campamentos a causa de la última ronda de la campaña genocida de las fuerzas de Afewerki y Abiy contra el pueblo de Tigray".
"Esto pasa ante la mirada de las ONG internacionales, cuyas actividades están siendo limitadas por los ataques sistemáticos contra infraestructura civil, incluidos camiones con ayuda humanitaria, por parte de las fuerzas de los tiranos gemelos del Cuerno de África", ha señalado.
"No estamos seguros de que la comunidad internacional vaya a mencionar esta tragedia, ni siquiera como un pie de página", ha lamentado a través de una serie de mensajes en su cuenta en la red social Twitter. "Trágico, pero Tigray prevalecerá", ha remachado.
El propio Getachew denunció la semana pasada un bombardeo eritreo contra Adi Daero y agregó que este acto de "terrorismo aéreo" se saldó con la muerte de varios civiles, si bien Etiopía afirmó posteriormente que su Fuerza Aérea había sido responsable del ataque.
Adís Abeba no se pronunció sobre el posible impacto del ataque sobre zonas civiles, si bien destacó que el TPLF estaba usando instalaciones médicas, escuelas, lugares de culto y zonas residenciales para ocultar armas.
El TPLF aseguró el lunes haberse retirado de la región de Amhara (norte) tras cerca de un mes de despliegue en varias zonas en el marco de la guerra en Tigray, en el marco de "un ajuste geográfico táctico" para hacer frente al "peligro existencial" que supone la ofensiva a gran escala por parte del Ejército eritreo.
El conflicto en Etiopía estalló tras un ataque del TPLF contra la principal base del Ejército, situada en Mekelle, tras lo que el Abiy ordenó una ofensiva contra el grupo tras meses de tensiones a nivel político y administrativo. En la actualidad hay en vigor una "tregua humanitaria", si bien ambas partes se han acusado de impedir la entrega de ayuda.
El TPLF acusa a Abiy de azuzar las tensiones desde su llegada al poder en abril de 2018, cuando se convirtió en el primer oromo en acceder al cargo. Hasta entonces, el TPLF había sido la fuerza dominante dentro de la coalición que gobernó Etiopía desde 1991, el Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope (EPRDF), sustentada en las etnias. El grupo se opuso a las reformas de Abiy, que consideró como un intento de socavar su influencia.