DAR ES SALAM, 22 Ago. (Thomson Reuters Foundation/EP) -
Un tribunal tanzano ha acusado de asesinato a 32 personas que fueron detenidas por su supuesta implicación en la muerte de cinco mujeres a las que habían recriminado prácticas de brujería, en un paso que ha sido aplaudido por los defensores de los Derechos Humanos.
La tradición local tanzana atribuye a actividades de brujería todo tipo de infortunios, desde la muerte a la infertilidad pasando por cosechas fallidas. Miles de ancianas habrían muerto en las últimas dos décadas víctimas de esta superstición, que en ocasiones sirve como cortina de humo para disputas más terrenales relativas, por ejemplo, al reparto de propiedades.
El último caso sienta en el banquillo a 32 personas acusadas de golpear hasta la muerte a cinco mujeres y quemar sus cadáveres el 25 de julio en la región de Tabora. El tribunal las ha acusado formalmente de asesinato, aunque los sospechosos aún no han podido declararse culpables o inocentes a la espera de que el 4 de septiembre el caso pase a una instancia competente.
La responsable de la Asociación de Abogadas de Tanzania, Athanasia Soka, ha destacado que se trata de la primera vez en que un grupo tan numeroso de personas rinde cuentas por crímenes de este tipo. Un vecino de la zona donde sucedieron los hechos, Lweno Masali, también ha expresado su satisfacción: "Estoy content al ver que las autoridades toman las medidas apropiadas para impedir los delitos violentos contra mujeres inocentes".
El Centro Legal y de Derechos Humanos de Tanzania estima que casi medio millar de personas han muerto en el primer semestre del año víctimas de la justicia practicada por grupos ciudadanos al margen de la ley. La mayoría de los crímenes habrían tenido lugar en la ciudad de Dar es Salam, la mayor del país, y en las zonas altas del sur.