WASHINGTON 4 Sep. (Reuters/EP) -
El magnate Donald Trump, que lidera la carrera por la candidatura presidencial republicana en Estados Unidos, se ha distanciado de algunos de sus rivales tras haber afirmado este viernes que acepta trabajar con el pacto nuclear alcanzado entre Irán y seis potencias occidentales y al criticar la negativa de la funcionaria de Kentucky a tramitar uniones gays.
El magnate ha calificado el pacto con Irán como "un acuerdo desastroso" y "un contrato horrible", pero ha aclarado que trabajaría con él, recordando que hay mucho dinero en juego y que sus rivales se equivocan al querer destruirlo.
Muchos de los otros 16 republicanos que buscan la nominación del partido para las elecciones de 2016 han prometido deshacer de inmediato el acuerdo si ganan.
"Este es el ejemplo perfecto de heredar un mal contrato", ha afirmado el empresario en una entrevista con MSNBC, aunque ha añadido que sería implacable a la hora de forzar su cumplimiento.
Trump tampoco está de acuerdo con el apoyo mostrado por algunos de los republicanos a la funcionaria de Kentucky que prefirió ir a la cárcel a tramitar las licencias para matrimonios homosexuales, pese a que el Tribunal Supremo respaldó en junio estas uniones. "Somos una nación de leyes", ha aseverado. "Se ha tomando una decisión y esa es la ley del país", ha sostenido.
Sobre la crisis de refugiados en Europa, al preguntarle si Estados Unidos debería aceptar más personas que huyen de la violencia en Oriente Próximo, Trump ha afirmado: "Posiblemente sí", pero ha apostillado que las opciones de ayuda estadounidenses son limitadas. "Tenemos nuestros propios problemas, muchos problemas que resolver. Nuestro país está quebrado", ha señalado.
El jueves, Trump firmó un compromiso de lealtad con el Comité Nacional Republicano y, tras semanas considerando la idea, prometió no lanzar una candidatura independiente. "No doy nada por hecho", ha afirmado, reconociendo la amplitud del movimiento republicano y añadiendo que entendía que se trataba de una "maratón".