WASHINGTON, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha autorizado este viernes que se desclasifique un polémico informe de los congresistas republicanos que cuestiona la labor del FBI y el Departamento de Justicia por su supuesto sesgo en contra del mandatario.
La mayoría de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes votó el lunes a favor de la difusión y Trump debía tomar una decisión antes del fin de semana. A pesar de los temores expresados en público por el FBI, el presidente ha confirmado este viernes que autoriza que el documento se haga público.
"El informe ha sido enviado al Congreso. Harán lo que tengan que hacer, pero es una vergüenza lo que le está ocurriendo a nuestro país", ha dicho Trump en la Casa Blanca, después de confirmar la desclasificación del texto, que podría ver la luz en cuestión de horas si la Cámara de Representantes así lo autoriza.
Trump, que ha hablado brevemente con los periodistas durante un acto en el Despacho Oval, ha subrayado que "muchas personas deberían sentir vergüenza y mucho más que eso".
El FBI, uno de los teóricos damnificados, esgrimió el miércoles en un insólito comunicado que "tuvo una oportunidad limitada de revisar este informe el día antes de que la Comisión votase a favor de su publicación". "Como expresamos durante nuestra revisión inicial, tenemos graves dudas sobre omisiones que afectan fundamentalmente a la exactitud", alegó la agencia.
INVESTIGACIONES SOBRE RUSIA
Como telón de fondo de esta polémica, figuran las acusaciones vertidas contra Trump y el Gobierno ruso por su supuesta connivencia en la campaña previa a las elecciones de 2017, algo que ambas partes se han esforzado en negar. Se investiga la posible injerencia de Moscú en dichos comicios en favor del magnate neoyorquino.
Los demócratas, que intentaron en vano publicar un informe alternativo al que ahora divulgarán los republicanos, han asegurado que en el texto que se podría hacer público se han incluido materiales clasificados de forma selectiva, en un intento por desacreditar al fiscal especial Robert Mueller, designado para investigar los lazos entre Trump y Moscú, y al 'número dos' del Departamento de Justicia, Rod Rosenstein.
El senador John McCain, una de las voces republicanas más críticas contra Trump en el Congreso, también ha difundido este viernes un comunicado en el que advierte de que "los últimos ataques contra el FBI y el Departamento de Justicia no sirven a los intereses de Estados Unidos, a ningún partido, a ningún presidente, sólo a (Vladimir) Putin".
McCain ha reiterado que "el régimen de Putin" urdió un "plan elaborado" para interferir en las elecciones de 2016 y, si bien por el momento considera que no hay pruebas de que dicha injerencia afectase al resultado electoral, sí ha querido expresar su temor por los efectos colaterales que está acarreando para la "división" política en Estados Unidos.
"El pueblo estadounidense se merece saber todos los hechos que rodean a los actuales esfuerzos de Rusia para subvertir nuestra democracia, por lo que la investigación del fiscal especial Mueller debe avanzar sin obstáculos", ha añadido el senador.
McCain ha emplazado a todos los cargos electos, "incluido el presidente", a dejar de analizar dichas pesquisas con las "torcidas lentes de la política" y esperar a las conclusiones de Mueller. "Si seguimos torpedeando nuestro propio Estado de Derecho, vamos a hacer el trabajo de Putin por él", ha apostillado en la nota.