Canadá, Suecia y Suiza empatan en la primera posición y España registra su mejor marca, en el 13º puesto del ranking
MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ascenso de Donald Trump a la Casa Blanca ha hundido la reputación internacional de Estados Unidos, debido a las polémicas políticas del nuevo presidente, que han diluido el "efecto Obama" y han devuelto los índices de popularidad de la potencia norteamericana a niveles de la era Bush, según el ranking anual del Reputation Institute, publicado este jueves.
El Country RepTrak mide desde 2009 la reputación internacional de los 55 países con mayor Producto Interior Bruto (PIB) del mundo a partir de la evaluación de 17 variables agrupadas en tres dimensiones --calidad institucional, calidad de vida y nivel de desarrollo-- a través de más de 39.000 entrevistas realizadas durante el mes de marzo a ciudadanos del G-8.
"La reputación de un país tiene un impacto directo", ha dicho el director general del Reputation Instutite, Fernando Prado. "Por ejemplo, aumentar un punto el indicador global de reputación en un determinado país supone un incremento medio de 3,1 por ciento en la llegada de turistas desde ese país y un incremento medio del 1,7 por ciento en las exportaciones hacia ese país", ha precisado.
En el caso de Estados Unidos este año se trata de un impacto negativo porque "la Presidencia de Donald Trump está teniendo gravísimas consecuencias". "En tan solo cinco meses, la reputación de Estados Unidos ha diluido el 'efecto Obama' y regresado a los pobres niveles de la Administración Bush", ha destacado la organización a través de un comunicado.
Estados Unidos es el país que más reputación ha perdido en el último año, lo que se ha traducido en una caída desde el puesto 27 al 38. Los principales retrocesos se han registrado en la percepción del "entorno político" (-21,6 por ciento), "bienestar social" (-11,8 por ciento), "país ético y transparente" (-11 por ciento), "participante responsable en la comunidad internacional" (-9,2 por ciento) y "uso eficiente de los recursos" (-5,8 por ciento).
Destaca en concreto la evolución en la opinión de los ciudadanos mexicanos sobre Estados Unidos después de que Trump les llamara "criminales" durante la campaña electoral y de que finalmente ratificara ya desde la Casa Blanca que construirá un muro en la frontera común --que pretende hacer pagar al país vecino-- para frenar la inmigración ilegal, el crimen organizado y hasta el terrorismo.
El Reputation Institute ha observado un "intenso rechazo hacia Estados Unidos entre los mexicanos". Sin embargo, al mismo tiempo "la reputación de México entre los estadounidenses prolonga este año la tendencia al alza iniciada en 2016" y los ciudadanos de la nación iberoamericana son percibidos cada vez más como "gente educada y confiable", lo que inclina a los estadounidenses a "visitar" e "invertir" en el país.
Junto a Estados Unido, Rusia (-8,1 por ciento) y Nigeria (-5,4 por ciento) "son los que más reputación pierden". Cabe mencionar igualmente el caso de Reino Unido porque el Brexit "está pasando factura" bajando cinco puestos. "Se deja notar, sobre todo, en los comportamientos favorables hacia el país, con significativos descensos en 'invertiría', 'trabajaría' o 'compraría productos'", apunta.
ESPAÑA ESCALA POSICIONES
En la otra cara de la moneda, Canadá vuelve a ser --por quinta vez-- el país con mejor reputación internacional, con un total de 82,8 puntos. Sin embargo, en realidad se encuentra en situación de "empate técnico" con Suecia y Suiza, que suman 82,5 y 82,8, respectivamente. El top ten lo completan Australia, Nueva Zelanda, Noruega, Finlandia, Dinamarca, Países Bajos e Irlanda, por este orden.
El informe destaca que en el caso de los llamados "países periféricos" de Europa, entre los que menciona a España y Portugal, "continúan mejorando su reputación y escalan posiciones en el ranking a medida que sus economías se recuperan". España gana en 2017 cuatro puntos, hasta los 64,6, y cuatro posiciones, hasta la 13ª. "Es su nivel más alto de la serie histórica del Country ReTrak", recalca.
Grecia es, sin embargo, "el país que en 2017 mejora más su reputación". Añade 14,3 puntos a su haber impulsado "tanto por la recuperación de su economía como por la ausencia de titulares negativos sobre el país en la prensa económica global". Pese a ello, "su reputación todavía está lejos de los niveles previos a su rescate por parte de la Unión Europea".
También es notable la mejoría de Emiratos Árabes Unidos (+13,6 por ciento) y Egipto (+10,7 por ciento). Por categorías, Australia "es el país mejor valorado por los ciudadanos del G-8 en la dimensión 'calidad de vida', en tanto que Japón lo es en 'nivel de desarrollo' y Suecia en 'calidad institucional'".
China, "aunque parte de indicadores de reputación muy bajos, mantiene un crecimiento constante en los últimos años a medida que va asumiendo su rol de potencia clave en el escenario mundial".
PAÍSES QUE AMORTIGUAN LOS CAMBIOS
El informe señala asimismo aquellos países que, a pesar de que han vivido situaciones inéditas este año, no se han visto reflejadas en su reputación internacional.
Así, en Venezuela, "la descomposición del régimen 'chavista'" se registra a nivel regional con un desplome del 36,5 por ciento, pero no en los países del G-8, con tan solo un -1,7 por ciento, "posiblemente como consecuencia de la falta de conocimiento de la situación política del país".
Brasil, donde Dilma Rousseff fue cesada en un 'impeachment' y su sucesor, Michel Temer, afronta un proceso judicial en el Supremo por corrupción, entre otros muchos escándalos que han afectado a toda la clase política y empresarial, "permanece casi estable", con una leve caída del -1,3 por ciento.
"La crisis de los Papeles de Panamá ha tenido poco impacto en el índice general de reputación de este país, pero sí ha afectado a algunos atributos sensibles para su posicionamiento internacional como 'ética y transparencia' o 'respeto internacional'", ha indicado.
Por otro lado, el acuerdo de paz firmado entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para acabar con la guerra más longeva del hemisferio occidental, solo ha permitido al país recuperar posiciones "muy lentamente", "manteniéndose en niveles demasiado bajos para la realidad" que vive.