NUEVA YORK, 21 Sep. (Reuters/EP) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este jueves una orden ejecutiva que abre la puerta a añadir nuevas sanciones contra personas y entidades vinculadas al régimen de Corea del Norte, en un nuevo intento por contener su carrera nuclear y armamentística mediante una vía que, de momento, no ha hecho caer a Pyongyang.
"Hoy anuncio una nueva orden ejecutiva, recién firmada, que amplía considerablemente nuestra capacidad para señalar a compañías, instituciones financieras, que financien y comercien con Corea del Norte", ha afirmado Trump, poco antes de mantener un almuerzo con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, y el presidente surcoreano, Moon Jae In.
Con este decreto, Trump aspira a "cortar todas las fuentes de ingresos que financian los trabajos de Corea del Norte para desarrollar las armas más mortíferas conocidas por la humanidad".
El presidente sitúa en el punto de mira a la industria textil, pesquera, manufacturera y de tecnologías de la información y ha señalado que el Departamento del Tesoro norteamericano tendría potestad para sancionar a bancos extranjeros que realicen transacciones vinculadas al comercio norcoreano. Washington, sin embargo, deja fuera el sector petrolero.
Trumo ha evitado dirigirse expresamente contra China, considerado el mayor socio comercial de Corea del Norte, y de hecho ha aplaudido al Banco Central del gigante asiático por ordenar a las entidades financieras que rompan sus relaciones con el país vecino.