MADRID, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los presidentes de Estados Unidos y México, Donald Trump y Enrique Peña Nieto, respectivamente, han mantenido este jueves una conversación telefónica en la que, además de lamentar los últimos desastres naturales sufridos por ambos países, han hablado del futuro que le espera a los beneficiarios del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), conocidos como 'dreamers' (soñadores).
Trump ha ordenado derogar este programa, impulsado en el año 2012 por su predecesor, Barack Obama, y ha dado al Congreso seis meses de plazo para aprobar una reforma migratoria que deberá aclarar el futuro de 800.000 personas, en su mayoría procedentes de México.
Peña Nieto ha expresado "la importancia que tiene para México el que se tenga una solución permanente para los beneficiarios del programa", según un comunicado de su oficina que recoge que Trump se mostró "optimista" sobra la posibilidad de que el Congreso norteamericano llegue a algún tipo de "solución" en el plazo previsto
Trump negocia con los demócratas algún tipo de medida bipartidista que permita aclarar el futuro de los 'dreamers', aunque por el momento no existe ningún de acuerdo al respecto. "Tenemos mucho que hacer en materia de seguridad. Queremos una seguridad muy fuerte en la frontera", ha explicado el presidente estadounidense a bordo del Air Force One, tras visitar las zonas afectadas por el huracán 'Irma' en Florida.
Esta seguridad también pasa, a ojos de Trump, por avanzar en la construcción de un muro en la frontera con México. En este sentido, espera que el Partido Demócrata no termine "obstruyendo" esta infraestructura que terminará viendo la luz tarde o temprano --"muy pronto", ha llegado a decir el mandatario--.
El polémico muro fronterizo ha sido uno de los principales motivos de disputa entre los dos gobiernos durante los últimos meses, a pesar de que Trump parece haber rebajado el tono que marcó ya en campaña electoral, cuando insistió en reiteradas ocasiones en que no sólo llevaría a cabo este proyecto, sino que sería México quien lo pagaría.
DESASTRES NATURALES
El motivo central de la llamada entre Trump y Peña Nieto, no obstante, era hablar de los daños causados en ambos países por los últimos desastres naturales. Según la oficina del presidente de México, el inquilino de la Casa Blanca ha expresado sus condolencias y solidaridad por el terremoto que azotó el sur de 8,2 que azotó el sur del país y por el paso del huracán 'Katia', mientras que Peña Nieto ha hecho lo propio en relación a los estragos causados por el huracán 'Irma' en Puerto Rico y Florida.
Trump ha explicado en un 'tuit' que no había podido hablar en los últimos tres días con su homólogo por problemas de conexión telefónica. "Ha sido imposible porque estaba en las montañas donde tuvo lugar el terremoto y no había cobertura móvil", ha añadido en su conversación con los periodistas en el Air Force One.