El magnate describe la caída de Al Assad en Siria como una "toma de poder hostil" por parte de Turquía
MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha pedido a la Administración Biden que deje de vender partes del muro construido en la frontera con México durante su primer mandato y ha prometido proseguir con su construcción cuando tome posesión en enero.
"Vamos a gastar cientos de millones de dólares más en construir el mismo muro que ya tenemos", ha criticado en una rueda de prensa desde su residencia de lujo en Mar-a-Lago, Florida, recogida por el canal de televisión conservador Fox News en la que ha prometido "restaurar" las fronteras de Estados Unidos.
El magnate ha explicado que durante su primer mandato gastaron "una enorme cantidad de dinero en la construcción del muro", ya que el material era "muy potente". "Es muy caro y ahora cuesta aproximadamente el doble que hace seis años", ha aseverado.
Trump ha indicado además que recientemente ha hablado con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. "Les hemos dicho que no es justo ni correcto. No pueden permitir que esta gente entre a nuestro país", ha dicho.
El presidente electo ha elegido al exdirector interino del Servicio de Migración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), Tom Homan, como responsable de la política migratoria en medio de las promesas del magnate de llevar a cabo deportaciones masivas una vez que se instale en la Casa Blanca.
"TOMA DE PODER HOSTIL"
Por otro lado, el magnate estadounidense ha descrito la caída del régimen de Bashar al Assad en Siria como una "toma de poder hostil" por parte de Turquía, que está detrás de la ofensiva liderada por yihadistas y rebeldes contra la capital, Damasco.
No obstante, ha resaltado que el proceso se ha llevado a cabo sin que se hayan perdido "muchas vidas" en Siria. "Assad era un carnicero", ha sentenciado, agregando además que con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se lleva "muy bien".
La ofensiva en Siria, lanzada el 27 de noviembre desde la provincia de Idlib permitió a yihadistas y rebeldes tomar la capital, Damasco, y poner fin al régimen de la familia Al Assad, en el poder desde 1971 --primero con Hafez al Assad (1971-2000) y posteriormente con su hijo, Bashar--, ante un repliegue constante de las tropas gubernamentales, respaldadas por Rusia e Irán.
INSTA A ZELENSKI A LLEGAR A UN ACUERDO
Trump también ha aprovechado para reiterar su postura sobre Ucrania y ha insistido en que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, debe llegar a un acuerdo con el lado ruso para poner fin a las hostilidades. "Tiene que haber un pacto. Hay demasiadas personas muertas", ha sentenciado.
Asimismo, ha asegurado que llevará tiempo reconstruir las ciudades ucranianas arrasadas por las fuerzas rusas y se ha mostrado en contra del deseo de Kiev de recuperar el territorio capturado, según ha recogido la agencia Bloomberg.
De igual forma, el presidente electo estadounidense ha criticado que la Administración Biden haya autorizado el uso de misiles ATACMS para contraatacar en territorio ruso. "Si yo fuera presidente, esta guerra nunca habría pasado", ha zanjado.