WASHINGTON, 11 May. (EUROPA PRESS) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha explicado este jueves que fue él quien pidió expresamente en tres ocasiones al cesado director del FBI, James Comey, que le informase de si estaba siendo investigado por la presunta vinculación de su campaña con las autoridades rusas. En el texto con el que Trump comunicó el martes el fulminante cese de Comey, el presidente aseguró que el responsable del FBI le había informado "en tres ocasiones distintas" de que no estaba siendo investigado, lo que ha generado todo tipo de dudas en estos últimos dos días. "Yo le pregunté en realidad", ha dicho el presidente, que ha circunscrito estas interacciones a una cena y dos llamadas telefónicas. "Si es posible me gustaría saber: ¿estoy siendo investigado?", ha añadido Trump, al ser preguntado por esta polémica durante una entrevista a NBC News. El mandatario ha alegado que en ningún momento intentó presionar a Comey por las pesquisas abiertas y ha recalcado que él también quiere saber "si hubo algún problema con las elecciones" y "si Rusia hizo algo". No obstante, ha negado cualquier tipo de "colusión" entre su campaña y Moscú y una supuesta afectación en el resultado de los comicios 8 de noviembre. Trump ha negado que, con este despido, quiera enviar un mensaje al futuro director del FBI para que desista en sus indagaciones y ha insistido en que, con Comey al frente, la agencia de seguridad ha vivido una "tormenta". "Tú lo sabes, yo lo sé, todos los saben. Sólo hay que mirar el FBI hace un año (...), no se ha recuperado desde entonces", ha asegurado. En este sentido, ha asumido la plena responsabilidad del despido de Comey, a quien ha llegado a tachar de "fanfarrón". Aunque en su nota inicial aludió a las recomendaciones planteadas por el Departamento de Justicia, en particular por el vicefiscal general, Rod Rosenstein, ahora apuntado que iba a cesar al director del FBI de todas formas. Este cambio de actitud contrasta con la postura que Trump había mantenido hasta ahora, especialmente a raíz de que Comey revelase a escasos días de las elecciones nuevas investigaciones sobre la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton, por el uso de un servidor privado de correo electrónico durante su etapa como secretaria de Estado. Trump aplaudió entonces su "valentía"