WASHINGTON, 5 May. (Reuters/EP) -
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha dado un golpe de timón a su política con respecto a China y ha anunciado sin previo aviso la imposición de nuevos aranceles a las importaciones chinas, un gesto que busca probablemente presionar a Pekín en la negociación de un acuerdo comercial que parecía muy cercano.
En las últimas semanas Trump había retrasado la imposición de aranceles para favorecer las negociaciones, pero este domingo ha anunciado en Twitter que a partir del viernes subirá al 25 por ciento los aranceles y que habrá más productos chinos tasados.
"El Acuerdo Comercial con China sigue adelante, pero demasiado lentamente porque intentan negociar. ¡No!", ha espetado a través de su cuenta personal en Twitter.
Los contactos se reanudarán previsiblemente en la semana entrante con un viaje del viceprimer ministro chino, Liu He, a Washington tras los contactos de abril en Pekín que el secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, calificó de "productivos". El propio Trump presumía el viernes pasado de que las negociaciones con China iban bien.