ATENAS, 28 Ene. (Reuters/EP) -
El primer ministro griego, Alexis Tsipras, no ha obtenido este sábado el apoyo del principal líder de la oposición para llegar a un consenso antes de intensificar las conversaciones entre Grecia y Macedonia para resolver una disputa de nombres de hace décadas.
Atenas y Skopje acordaron intensificar las negociaciones para llegar a un acuerdo en una disputa que ha obstaculizado las ambiciones de Macedonia de unirse a la OTAN y a la Unión Europea.
Grecia defiende que el nombre de Macedonia implica un reclamo territorial sobre su propia región norte de ese nombre. Cientos de miles de griegos se manifestaron en la ciudad norteña de Tesalónica a principios de este mes para protestar contra el uso del nombre "Macedonia" en cualquier solución de disputa.
"No dividiremos a los griegos para unir a Skopje", ha asegurado el líder del partido Conservador Nueva Democracia, Kyriakos Mitsotakis.
Mitsotakis ha señalado que resolver la disputa por el nombre no era solo una cuestión de política exterior, sino un problema serio relacionado con la historia de Grecia y "la identidad misma de los griegos".
Un enviado de Naciones Unidas, Matthew Nimetz, viajará esta semana a ambos países para continuar las conversaciones.
Los dos países están enfrentados desde 1991, cuando Macedonia se independizó de la antigua Yugoslavia. El problema, según Atenas, es que el nombre del país vecino coincide con el de una región del norte de Grecia donde nació Alejandro Magno. Hasta ahora, Grecia ha conseguido impedir la entrada de ese país en la Unión Europea y en la OTAN.
Macedonia fue reconocida en 1993 por Naciones Unidas con la denominación de la "antigua República Yugoslava de Macedonia", pero más de un centenar de países, entre ellos cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, han reconocido al país balcánico únicamente como República de Macedonia.
En 1995 se alcanzó un acuerdo interino que detalla las diferencias entre los dos países respecto al nombre de la República Yugoslava de Macedonia.
El texto obliga a Atenas y a Skopje a continuar con las conversaciones bajo los auspicios de la Secretaría General de Naciones Unidas para intentar llegar a un acuerdo.
Los ministros de Exteriores de Grecia y Macedonia reiteraron el 11 de enero su compromiso para resolver la disputa, asegurando que están a la expectativa de los planes que pueda proponer este mes el enviado de Naciones Unidas.