MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro tunecino, Habid Essid, ha anunciado una serie de medidas con el objetivo de reforzar la seguridad tras el atentado contra un complejo hotelero en una playa de Susa, entre las que se incluye el cierre de todas las mezquitas que no estén bajo el control de las autoridades.
Essid ha indicado que el Ejecutivo tiene previsto cerrar todas las mezquitas que no estén bajo control del Ministerio de Asuntos Religiosos durante la semana que viene, por "incitar a la violencia", y que ascenderían a 80, según cifras de Reuters.
El mandatario también ha anunciado que la financiación de las asociaciones quedará en manos del Gobierno, además de la inmediata disolución de todas las organizaciones y partidos políticos que no respeten la Constitución.
Por otro lado, el Gobierno ha declarado "zona militar cerrada" todas las áreas montañosas del país, para prevenir que los terroristas se escondan en esa zona, según ha recogido la emisora tunecina Radio Mosaique.
Además, todos los reservistas del Ejército serán movilizados y dispersados a lo largo de todo el país, en especial en las zonas turísticas y costeras. El Gobierno convocará varias reuniones de emergencia para abordar la situación en el país
ESTADO ISLÁMICO
El atentado ha sido perpetrado durante el mes del Ramadán, el mes sagrado musulmán, y ha sido reivindicado a través de Twitter por Estado Islámico, que ha dado detalles del ataque y ha identificado al terrorista como Abu Yihya al-Kairouni.
La milicia yihadista ha hecho varios llamamientos a través de las redes sociales para atentar durante este mes. "Nuestro hermano, soldado del Califato, alcanzó su objetivo pese a las medidas de seguridad", ha indicado la milicia, que ha calificado el complejo hotelero de "burdel" y ha reivindicado la muerte de 40 "infieles".