MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Turquía han afirmado este jueves que adoptarán "medidas adicionales" ante los bombardeos y ataques en Siria, y principalmente en la provincia de Idlib (noroeste), en medio de la ofensiva militar contra los rebeldes en la zona.
El Consejo de Seguridad Nacional turco ha indicado en un comunicado que se ha acordado "tomar medidas adicionales contra los ataques terroristas contra las fuerzas de seguridad turcas y la población civil en varias regiones de Siria, especialmente en Idlib".
Así, ha criticado que estos ataques continúen "pese a los acuerdos alcanzados con los estados activos en Siria". "La determinación sobre este asunto se reitera nuevamente", ha agregado, según la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, acusó el miércoles a Rusia de no cumplir con los acuerdos para reducir el conflicto en Siria, especialmente en la provincia de Idlib (noroeste), y ha recalcado que Ankara "adoptará sus propias acciones".
"Desafortunadamente, Rusia no ha cumplido los acuerdos de Astaná y Sochi", dijo el mandatario. "Hemos esperado hasta ahora, pero a partir de este momento vamos a adoptar nuestras propias acciones", agregó.
Erdogan destacó que "no se trata de una amenaza" pero incidió en el que Gobierno ruso "espera que Rusia dé al régimen (sirio) la advertencia necesaria", tal y como recogió el diario turco 'Daily Sabah'.
"Rusia continuará este proceso de forma diferente, ya sea con el régimen (sirio) o con Turquía. Rusia nos dice que luchan contra el terrorismo. ¿Quiénes son terroristas? ¿Los que defienden su propia tierra?", se preguntó.
LA SITUACIÓN EN IDLIB
Los gobiernos de Turquía y Rusia, que apoyan a bandos distintos en el conflicto, alcanzaron en 2018 en Sochi un acuerdo para crear una zona desmilitarizada en Idlib para impedir una ofensiva del Ejército contra la provincia, controlada por rebeldes y yihadistas.
Por otra parte, Turquía, Rusia e Irán son los garantes del conocido como proceso de paz de Astaná, lanzado en Kazajistán en enero de 2017 para poner fin a la guerra en Siria. El proceso va en paralelo al impulsado por Naciones Unidas en Ginebra.
Las declaraciones de Erdogan han llegado horas después de que Damasco anunciara la toma de la ciudad de Maaret al Numan, uno de los bastiones de los rebeldes en la provincia.
La provincia de Idlib y zonas de las de Alepo y Hama se encuentran en manos de varios grupos armados, el más importante de los cuales es el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS). El Gobierno de Siria ha defendido que la ofensiva es parte de su lucha contra el terrorismo en el país.
A punto de cumplirse el noveno aniversario del inicio de la guerra civil en Siria, el Gobierno de Al Assad ya ha recuperado el control de casi todo el territorio sirio, a excepción de zonas de Idlib y partes del norte y el noreste del país, donde operan milicias kurdas y grupos rebeldes apoyados por Ankara tras su ofensiva contra los grupos kurdos en la zona fronteriza.