ANKARA, 30 Dic. (Reuters/EP) -
Turquía estaría barajando el envío de milicianos del Ejército Libre Sirio (ELS), una milicia proturca con presencia en el norte de Siria, a Libia para reforzar al Gobierno libio reconocido por la comunidad internacional frente a las fuerzas de Jalifa Haftar que asedian la capital, Trípoli, según fuentes turcas.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha manifestado recientemente su disposición a enviar tropas a Libia en apoyo del primer ministro libio, Fayez al Serraj, con el objetivo final de proteger las inversiones turcas en Libia y reforzar a su principal aliado en sus reclamaciones sobre la frontera marítima en el Mediterráneo oriental.
Dos altos cargos turcos y dos fuentes de las fuerzas de seguridad han confirmado en declaraciones a Reuters bajo condición de anonimato que Ankara todavía no ha enviado a ningún combatiente sirio a Libia, "pero se está evaluando y hay reuniones sobre esta cuestión". "Hay una tendencia a ir en esa dirección", ha explicado una de las fuentes.
El ELS fue la fuerza de vanguardia de la ofensiva militar turca en el norte de Siria del pasado mes de octubre contra las milicias kurdas y además Ankara respalda a las milicias rebeldes, principalmente yihadistas, que controlan el norte de la región siria de Idlib, último reducto de la sublevación de 2011 que provocó la guerra civil siria.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización con sede en Londres pero con fuentes en Siria, ha asegurado que unos 300 combatientes del ELS han sido ya enviados a Libia y otros están entrenándose en Turquía con el mismo objetivo.
Sin embargo, un portavoz del ELS ha negado siquiera que Turquía haya pedido el envío de milicianos a Libia, aunque ha reconocido que hay combatientes individuales que han pactado trabajar como "guardaespaldas" para una empresa turca de seguridad a cambio de dinero para proteger bases y sedes turcas en Libia.
El envío de tropas turcas a Libia depende de su aprobación en el Parlamento. Este lunes se ha presentado la propuesta en la Cámara y en cuestión de días podría ser aprobada. La oposición sin embargo rechaza el despliegue porque considera que agravaría el conflicto.