El Gobierno chipriota tilda las acusaciones de "absolutamente inaceptables", tras las advertencias del líder de Hezbolá contra el país
MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Turquía ha afirmado que Chipre es "una base de operaciones" para la ofensiva lanzada por Israel contra la Franja de Gaza y ha advertido del riesgo de una expansión del conflicto tras las amenazas vertidas contra Nicosia por el líder del partido-milicia chií Hezbolá, Hasán Nasralá, por el supuesto uso de su territorio para atacar Líbano.
El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, ha señalado en una entrevista concedida al diario 'Haberturk' que Ankara "ha advertido desde el inicio a actores europeos sobre la administración grecochipriota" y ha agregado que esta zona de la isla "se ha convertido en una base de operaciones".
"Vemos constantemente en informaciones de Inteligencia que la administración grecochipriota en el sur de Chipre es una base de operaciones contra Gaza por parte de varios países", ha dicho, antes de insistir en que "cuando se trasladó a la agenda, (los países europeos) dijeron de pronto que se trataba de una base logística".
En este sentido, ha afirmado que "el hecho de que esté siendo usado para operaciones en Oriente Próximo no beneficiará a la administración grecochipriota ni a Grecia". "Cuando eres parte de las guerras en Oriente Próximo, ese fuego te hallará. Dado que estamos en el mismo espacio geográfico, también nos hallará a nosotros", ha manifestado, antes de pedir que se evite la "grave militarización" de la situación y del "gran peligro de expansión" del conflicto.
Fidan ha acusado además al Gobierno de Israel de "tener una política de usar a Hamás como excusa para destruir completamente el movimiento de resistencia palestina y legitimar e institucionalizar una ocupación que continúa desde hace años", al tiempo que ha criticado el apoyo internacional a las autoridades israelíes en la ofensiva contra Gaza, desatada tras los ataques perpetrados el 7 de octubre.
Por ello, ha argumentado que el conflicto en Gaza es un asunto "extremadamente importante" a nivel mundial y ha reiterado su apoyo a la materialización de la solución de dos Estados, que contempla la creación de un Estado palestino en las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como capital.
Fidan ha afirmado que el riesgo de expansión del conflicto continuará existiendo "mientras Israel siga con su genocidio". "Ahora Líbano está en la agenda. Los actores en Líbano amenazan a Chipre como precursor. Hay operaciones en Siria", ha recalcado, antes de adelantar que "se asume que Israel atacará Hezbolá en Líbano (...) una vez logre sus principales objetivos militares frente a Hamás".
En respuesta, el portavoz del Gobierno de Chipre, Konstantinos Letymbiotis, ha afirmado que las acusaciones de Fidan son "absolutamente infundadas", mientras que fuentes diplomáticas griegas citadas por la agencia de noticias de Chipre han recalcado que "las amenazas contra la soberanía y el estatus de un Estado miembro de la UE son absolutamente inaceptables".
Turquía invadió Chipre en verano de 1974 después de que nacionalistas y partidarios de la junta militar que gobernaba Grecia en aquel entonces dieran un golpe de Estado en la isla apenas una semana después. La invasión culminó con divisiones étnicas y territoriales en Chipre.
Naciones Unidas determinó la división de la isla, y también de la capital chipriota, Nicosia, una bajo soberanía grecochipriota y la otra bajo administración turcochipriota. En 1983 los turcochipriotas declararon su territorio como Estado independiente bajo el nombre de República Turca del Norte de Chipre, tan solo reconocida por Turquía.
LAS ADVERTENCIAS DE HEZBOLÁ
Nasralá denunció la semana pasada que Israel "lleva a cabo operaciones en Chipre todos los años" y que no dudaría en hacer uso de la infraestructura en la isla en caso de guerra. "En ese momento, nos consideraremos en estado de guerra con Chipre", advirtió, antes de sostener que "abrir aeropuertos y bases chipriotas al enemigo israelí para atacar Líbano significaría que el Gobierno chipriota es parte de la guerra".
En respuesta, el presidente de Chipre, Nikos Christodoulides, dijo que el país "es parte de la solución y no del problema", en referencia al corredor marítimo abierto hacia la Franja de Gaza para la entrega de ayuda humanitaria. "Chipre no participa en ningún conflicto militar", recalcó.
Por ello, resaltó que las palabras de Nasralá "no son agradables" y añadió que "no reflejan la realidad", al tiempo que hizo hincapié en que Nicosia tiene canales diplomáticos abiertos tanto con el Gobierno de Líbano como con el de Irán, uno de los principales aliados de Hezbolá.
El Ejército israelí y Hezbolá --respaldado por Irán y que cuenta con un importante peso político en Líbano-- mantienen una serie de enfrentamientos desde el 8 de octubre, un día después de los ataques perpetrados por Hamás y otras facciones palestinas.
Las tensiones han ido al alza durante las últimas semanas y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió recientemente de que el Ejército israelí "está preparado para una acción muy poderosa" en la frontera con Líbano, mientras que el propio Ejército asegura tener ya un plan preparado para ello.