ANKARA 10 Ago. (Reuters/EP) -
Turquía está sopesando "otras opciones" para cooperar en materia de defensa porque no ha recibido el apoyo que esperaba de sus aliados de la OTAN tras el fallido golpe de Estado del 15 de julio, según ha revelado este miércoles el portavoz presidencial, Obrahim Kalin.
Kalin ha explicado, en declaraciones a los medios de comunicación, que los países occidentales han mostrado más preocupación por la purga que ha provocado la detención de decenas de miles de personas que por la asonada militar en sí misma.
Además, ha aprovechado para reiterar las quejas de Turquía a la Unión Europea porque aún no ha eliminado los visados para la entrada de ciudadanos turcos en territorio comunitario, uno de los requisitos en los que se basa el acuerdo migratorio entre Ankara y Bruselas.
El ministro de Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, ya expresó su preocupación por el acercamiento entre Rusia y Turquía, cuyos presidentes han acordado devolver la relación bilateral "al nivel anterior a la crisis" generada por el derribo de un caza ruso a mano de las fuerzas turcas el año pasado.
La OTAN, por su parte, ha descartado este miércoles la salida de Turquía de la organización internacional y ha subrayado que la permanencia de Ankara "no está en cuestión", al tiempo que ha valorado que se trata de un "aliado valorado" que proporciona "contribuciones sustanciales a los esfuerzos conjuntos".