BRUSELAS, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, ha defendido este lunes como "solución racional" que Reino Unido solicite un aplazamiento del Brexit para evitar un divorcio caótico por la falta de acuerdo sobre las condiciones de la separación, si bien ha admitido que la primera ministra británica, Theresa May, no contempla este escenario porque cree que aún es capaz de lograr un acuerdo.
"Creo que en la situación en la que estamos, una extensión sería una solución racional, pero la primera ministra May sigue creyendo que es capaz de evitar este escenario", ha revelado Tusk, en una rueda de prensa al término de la cumbre de la Unión Europea y la Liga Árabe en la localidad egipcia de Sharm el Sheij.
Tusk se reunió la víspera con May, quien ha aprovechado la cumbre en Egipto para tratar en bilateral las dificultades del Brexit con varios líderes, entre ellos la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
De su encuentro con la 'premier', el presidente del Consejo europeo ha explicado que sirvió para explorar el "contexto legal y de procedimiento" de la posibilidad de solicitar una prórroga del artículo 50 del Tratado de la UE, que establece las condiciones de salida para un Estado miembro que quiere dejar el club comunitario.
Este artículo establece que para activar una eventual prórroga, es necesario primero que el Estado miembro afectado lo solicite y después que la petición sea aceptada por "unanimidad" por el Consejo europeo.
Por ello, hasta ahora la Unión Europea ha evitado pronunciarse sobre este escenario, argumentando que le corresponde a Londres dar el primer paso y que solo lo contemplaría si se tratara de una prórroga con un objetivo concreto cerrado y no de un mecanismo para simplemente aplazar la salida abrupta.
A un mes del Brexit, previsto para el 29 de marzo, Tusk ha dicho que está claro que no existe una mayoría suficiente en la Cámara de los Comunes para aprobar un acuerdo que "ofrezca una alternativa al Brexit caótico o a la prórroga.
"Cuanto menos tiempo quede para el 29 de marzo, más probable es que haya una extensión. Es un hecho objetivo, no muestra una intención, ni es nuestro plan, es un hecho objetivo", ha zanjado.
Juncker, que en el último mes se ha reunido con May hasta en tres ocasiones, la última este mismo lunes, ha dicho en la misma rueda de prensa que Tusk que estos contactos están permitiendo "buenos avances".
Fuentes comunitarias han añadido que tanto May como Juncker han convenido en la necesidad de resolver la situación "a tiempo" para la próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, que tendrá lugar los días 21 y 22 de marzo en Bruselas.
Con este objetivo, los contactos entre los negociadores se mantendrán en los próximos días, empezando este martes con un encuentro en Bruselas entre el negociador jefe de la UE, Michel Barnier, y el equipo británico, que incluye al Fiscal general británico, Geoffrey Cox.
AVANZANDO "COMO SONÁMBULOS"
Entre tanto, otros líderes como el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, uno de los principales apoyos de May en sus contactos con la UE, es menos optimista que el jefe del Ejecutivo comunitario y, en declaraciones a la cadena BBC, ha dicho desde Egipto que están avanzando "como sonámbulos" hacia un Brexit sin acuerdo y ha pedido a May que "despierte".
Aún con la perspectiva de lograr un acuerdo para revisar las condiciones de divorcio y convencer al Parlamento británico para que lo apruebe en el voto del 12 de marzo, los tiempos para cumplir con todos los procedimientos de ratificación del Tratado de Retirada y tramitación de las leyes para hacerlo posible se agotan.
A pesar de todo, May insiste en descartar la opción de solicitar una prórroga porque cree que no solucionaría las dificultades que le impiden sacar adelante el acuerdo que negoció con Bruselas, y cuyo principal escollo en Westminster sigue siendo la salvaguarda diseñada para evitar la vuelta a una frontera física en la isla irlandesa.
"Un retraso en este proceso no garantiza una decisión en el Parlamento, no ofrece un acuerdo", ha declarado May en los márgenes de la cumbre europea con la Liga Árabe.
"Con ello solo se retrasa el punto en el que se debe tomar la decisión y creo que una ampliación del artículo 50 no estaría abordando el problema", ha continuado, para después afirmar que en sus contactos con los líderes europeos ha detectado una voluntad clara de hallar una solución que permita una desconexión "fluida y ordenada".
Tusk también ha expresado la determinación europea de, sea cual sea el escenario final, mostrar una actitud de "pleno entendimiento y buena voluntad".