Archivo - El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Valeri Zaluzhni. - Europa Press/Contacto/Yuliia Ovsiannikova
MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Valeri Zaluzhni, ha reconocido sentirse "enfadado" y ha rechazado las críticas internacionales a la tan anunciada contraofensiva por desarrollarse lentamente. "Cada metro se consigue con sangre", ha recalcado.
"Las tropas avanzan todos los días, aunque sea solo 500 metros. Esto no es un espectáculo. No es un programa que todo el mundo esta viendo o apostando ni nada por el estilo. Todos los días, cada metro se consigue con sangre", ha expresado en una entrevista con el diario estadounidense 'The Washington Post'.
Zaluzhni también ha descartado que la crisis interna rusa tras el intento fallido de rebelión del Grupo Wagner pueda ayudar de manera significativa a esta tan anunciada contraofensiva ucraniana, pues las defensas de las fuerzas rusas no se han debilitado.
Wagner ya abandonó la línea del frente tras las batallas en Bajmut, ha puesto como ejemplo. "Hay muchas preocupaciones y Wagner está entre ellas, pero no es la única (...) Nuestra tarea es prepararnos para los peores escenarios. Y trataremos de minimizar las posibles consecuencias de lo que pueda ocurrir", ha dicho.
En ese sentido, Zaluzhni ha subrayado que sin el suministro de armas y equipos prometidos por sus socios internacionales, "estos planes son totalmente imposibles". Aún así, ha destacado que "se llevan a cabo", pero "tal vez no tan rápido como les gustaría a quienes observan del programa".
Zaluzhni ha insistido en que necesitan más carros de combate, artillería y los tan ansiados aviones de combate, que desde hace meses vienen reclamando sin mucho éxito. "Es como si ahora fuéramos a la guerra con arcos y flechas", ha protestado.
"La cantidad de aviones que patrullan nuestras fronteras occidentales es el doble de la cantidad de aviones rusos que destruyen nuestras posiciones. ¿Por qué no podemos tomar al menos un tercio de estos? Nadie dice de rearmarse con 120 aviones (...) Una cantidad muy limitada es suficiente", ha reclamado.
"No hemos conseguido que los Leopard fueran conducidos en desfiles o fotografiados por políticos o famosos. Están aquí para la guerra y en el campo de batalla son un objetivo", ha dicho en referencia a los últimos carros de combate recibidos y destruidos por las fuerzas rusas.
Ante las amenazas del presidente ruso, Vladimir Putin, de utilizar armamento nuclear en el conflicto, Zaluzhni ha subrayado que no es suficiente para detener a las tropas ucranianas. "Haremos nuestro trabajo (...) ¿qué debemos hacer? ¿Rendirnos?" se ha preguntado.