BRUSELAS, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea ha amenazado con sanciones a los autores del golpe militar en Burkina Faso si no devuelven el poder a las autoridades civiles de forma "inmediata e incondicional" y ha asegurado que "el golpe de Estado constituye un ataque inaceptable al proceso de transición" en marcha en el país, que debería concluir con las elecciones del 11 de octubre.
"Nos reservamos la posibilidad de estudiar medidas potenciales, incluido contra los autores del golpe de estado", ha advertido en rueda de prensa el portavoz de la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Alexander Polack.
El portavoz ha rechazado confirmar si la UE suspenderá su ayuda al desarrollo para Burkina Faso en respuesta al golpe.
Polack ha dejado claro que el Acuerdo de Cotonou, que regula las relaciones entre la UE y Burkina Faso, contiene "toda una serie" de "medidas restrictivas" que son "posibles". "Pero por ahora no es nuestra intención entrar en más detalles. Lo esencial para nosotros es que se devuelva el poder de inmediato y sin condiciones previas a las autoridades civiles", ha insistido.
"Evidentemente el golpe de Estado constituye un ataque inaceptable al proceso de transición, que está en marcha", ha agregado el portavoz.
La UE se mantiene en "estrecha cooperación" con la ONU, la Unión Africana, la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) y el grupo de seguimiento de apoyo a la transición para "buscar una respuesta coordinada", ha subrayado Polack.
"El poder debe ser devuelto inmediatamente y sin condiciones previas a las autoridades civiles, para garantizar la vuelta a la transición política y, esto, evidentemente de forma acorde con la Constitución de Burkina Faso y la Carta de la Transición", ha incidido.
La junta militar que se ha hecho con el poder en Burkina Faso ha accedido este viernes a liberar al presidente interino, Michel Kafando, que el miércoles fue retenido junto a su Gobierno por un grupo de uniformados leales al Gobierno anterior.
Soldados y manifestantes ya se enfrentaron el jueves en las calles de la capital burkinesa, dejando un saldo de tres muertos y unos 60 heridos, de acuerdo con fuentes médicas citadas por la agencia de noticias Reuters.