BRUSELAS 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los negociadores de la Eurocámara y de los Gobiernos de los 28 han alcanzado este miércoles un acuerdo final para imponer un tope a las comisiones interbancarias por pagos con tarjeta. El tope será de un máximo del 0,3% del valor de la transacción para las tarjetas de crédito y del 0,2% para las de débito en operaciones transfronterizas.
Para las transacciones domésticas, los Estados miembros podrán aplicar el tope del 0,2% al valor medio ponderado anual de todas las transacciones domésticas de la red de tarjetas. No obstante, este sistema se aplicará sólo durante los cinco primeros años. A partir de entonces, las comisiones para las transacciones domésticas serán del 0,2% del valor de la transacción o una tarifa fija de como máximo cinco céntimos.
Los nuevos topes se aplicarán seis meses después de la entrada en vigor del reglamento, que todavía debe ser ratificado por los Estados miembros y por el pleno de la Eurocámara, probablemente a principios de 2015.
Las comisiones en cuestión están incluidas en los costes de los comercios por aceptar tarjetas de pago como Visa o MasterCard y se repercuten sobre los consumidores finales con precios más altos. El coste para los comercios supera los 10.000 millones de euros al año, según la Comisión.
Las nuevas reglas no se aplicarán a las denominadas redes tripartitas de tarjetas, como Diners o American Express, en las que está implicado un solo banco. Las tarjetas comerciales utilizadas sólo para gastos empresariales quedarán también exentas.