Viktor Orbán, primer ministro de Hungría - Jaroslav Novák/TASR/dpa
BRUSELAS, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea cierra filas este viernes para dejar claro que censura el viaje sorpresa del primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, a Moscú en lo que Budapest ha definido como "misión de paz" pero sobre el que el bloque comunitario ha querido dejar claro que no se produce en nombre de la UE y que, en todo caso, cualquier diálogo debe contar con Ucrania y no limitarse al "agresor", en referencia al presidente ruso, Vladimir Putin.
"El apaciguamiento no detendrá a Putin", ha dicho en un mensaje difundido en redes sociales la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, minutos después de que se confirmara la llegada de Orbán a suelo ruso.
"Sólo la unidad y la determinación allanarán el camino hacia una paz amplia, justa y duradera en Ucrania", ha remachado la jefa del Ejecutivo comunitario, en una declaración que sigue la línea marcada en mensajes anteriores del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y del Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell.
El portavoz jefe de Von der Leyen, Éric Mamer, ha añadido en una rueda de prensa en Bruselas que, si bien no hay duda de que Orbán no puede hablar por boca de la Unión Europea, el hecho de que este viaje tenga lugar sólo cinco días después de asumir la presidencia de turno del Consejo de la UE tiene un "simbolismo claro".
En este sentido, Mamer ha avisado de que esta situación "pone seriamente en duda" el tradicional viaje que marca el inicio de la presidencia rotatoria con una visita del Colegio de Comisarios al Estado miembro y que, en este caso, Bruselas barajaba para "después de las vacaciones".
Aunque lo habitual es que la visita de la Comisión se produzca en los primeros días de presidencia, en los últimos días el Ejecutivo comunitario se resistió en dar una fecha precisa, pero confirmó que el Colegio no iría a Budapest en julio y que se buscaba fecha en septiembre.
ORBÁN NO CONSULTÓ EL VIAJE
Tanto desde la Comisión Europea como desde el Consejo, distintas fuentes han apuntado que el viaje de Orbán a Moscú se ha preparado por iniciativa propia y sin consultarlo con nadie en Bruselas.
Fuentes europeas consultadas por Europa Press, de hecho, apuntan que el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, intentó sin éxito contactar con Orbán para confirmar de primera mano los rumores que ya el jueves apuntaban a su inminente viaje. "Si el primer ministro Orbán hubiera preguntado, el presidente Michel le hubiera desaconsejado fuertemente tal visita", concluyen las fuentes.
En un aviso difundido en redes sociales también el jueves, Michel quiso dejar claro que Orbán "no tiene mandato" para hablar en nombre de los 27 en materia de política exterior y añadió que "el Consejo Europeo es claro: Rusia es el agresor, Ucrania es la víctima. No se pueden celebrar debates sobre Ucrania sin Ucrania".
Borrell, por su parte, ha incidido en otro comunicado este viernes que la posición de la Unión Europea respecto al papel de Rusia en la agresión contra Ucrania está claramente recogida en múltiples declaraciones e incluye "excluir contactos oficiales entre la UE y el presidente Putin".
"Además, merece la pena recordar que el presidente Putin ha sido imputado por el Tribunal Penal Internacional y se ha dictado una orden de arresto por su papel en la deportación forzosa de niños desde Ucrania a Rusia", ha apostillado Borrell.
También se ha pronunciado al respecto la que será la próxima jefa de la diplomacia europea, la todavía primera ministra estonia, Kaja Kallas, quien ha acusado a Orbán de estar "aprovechándose" de la posición de presidencia del Consejo de la UE "para sembrar confusión". Al contrario, ha recalcado Kallas, el líder húngaro "no representa en modo alguno las posiciones de la UE", que "está unida, claramente en respaldo a Ucrania y contra la agresión rusa".
El canciller alemán, Olaf Scholz, a su vez, ha querido dejar claro que el Consejo Europeo (formato en que se reúnen los líderes de la UE) "está representado por Charles Michel" y que la posición comunitaria es "muy clara" a la hora de "condenar la guerra de agresión rusa" y dejar claro que Ucrania cuenta con el apoyo del bloque.
El primer ministro de Polonia, Donald Tusk, que ya el jueves interpeló desde las redes sociales a Orbán para que aclarara si prepara un viaje a Rusia, ha retomado unas palabras del propio mandatario húngaro ofreciéndose como "herramienta" hacia la paz para advertirle de que "la pregunta es en manos de quién está esa herramienta".
También el portavoz de Von der Leyen ha apuntado en esa línea que la Unión Europea quiere una "paz justa" para Ucrania y no el "apaciguamiento" ruso, por lo que desde Bruselas ven el viaje de Orbán "más como el juego de Putin" que un instrumento para llegar a una "paz real y duradera".