MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
Tres semanas después de su llegada a Kenia, la misión de observación de la Unión Europea ha comenzado este fin de semana sus tareas de supervisión sobre las elecciones generales de agosto en el país africano que decidirán al sucesor del presidente, Uhuru Kenyatta.
Los candidatos a la Presidencia, entre ellos los dos claros favoritos, William Ruto (Alianza Democrática Unida) y Raila Odinga (Azimio la Umoja), han pedido a sus simpatizantes que participen en paz durante la campaña electoral con vistas a los comicios del día 9 de agosto, frente a lo ocurrido en las elecciones de 2017, que se saldaron con medio centenar de muertos y más de cien heridos.
Un total de 180 observadores, entre ellos 48 a largo plazo que se repartirán entre 39 condados del país, serán los encargados de evaluar el proceso de votación, conteo y tabulación como parte de la Misión de Observación Electoral de la UE (UE MOE), que lleva consigo a analistas de medios sociales, tecnología de voto y medios de comunicación.
"Las próximas elecciones generales en Kenia", ha manifestado el Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, "serán cruciales para que los ciudadanos determinen qué futuro les espera, para que los actores demuestren su compromiso con la democracia, con una competencia justa en elecciones pacíficas; y para la región en general para promover la estabilidad".
La misión emitirá una declaración preliminar poco después del día de las elecciones y permanecerá en Kenia hasta la finalización del proceso electoral, incluso en caso de una segunda ronda de elecciones presidenciales, y cualquier proceso de quejas y apelaciones, según ha informado el jefe de la misión, Ivan Stefanec, al diario keniano 'The Nation'.
Ruto se enfrentará a su gran rival Odinga, en su momento una figura antisistema, que sorprendió a analistas y a los propios kenianos al trabar una alianza con el presidente Kenyatta en 2018.
Esta alianza sucedió tras la violentísima campaña electoral, hasta el punto de que el que fuera antiguo líder opositor es visto ahora como un 'delfín' del mandatario. Esta relación es especialmente sangrante para el vicepresidente Ruto, considerado en su momento como el "heredero" de Kenyatta.