BRUSELAS 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea ha constatado este miércoles la falta de voluntad de diálogo entre los líderes de Serbia y Kosovo después de que la reunión llamada a retomar las negociaciones para la normalización de las relaciones se haya saldado sin un encuentro entre el presidente serbio, Aleksandar Vucic, y el primer ministro kosovar, Albin Kurti.
La nueva ronda del diálogo entre Belgrado y Pristina para encauzar el diálogo facilitado por la UE, después de meses marcados por las disputas como la limitación por parte de Kosovo del uso del dinar y permitir solo los pagos en euros, se ha saldado sin resultados, tal y como ha reconocido el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, quien ha fracasado en que Vucic y Kurti tuvieran un cara a cara en Bruselas.
"El proceso de normalización sólo puede avanzar tan rápido como quieran las dos partes, porque se trata de la normalización de sus relaciones, entre ellas. Nosotros no podemos querer la normalización más de lo que quieren Kosovo y Serbia. Son las partes las que tienen que normalizar las relaciones entre ellos, no con nosotros", ha afirmado.
El jefe de la diplomacia europea ha indicado que la reunión a tres partes, mediada por la UE, se ha visto frustrada por las condiciones que exigía Pristina. "Kosovo no estaba dispuesto a celebrar esta reunión trilateral. Serbia estaba dispuesta a hacerla. Pero se necesitan dos para bailar el tango, y se necesitan dos para sentarse a la mesa para continuar el diálogo", ha señalado.
En este sentido, Borrell ha insistido en que el paso clave ahora es poner en marcha el acuerdo de normalización que pactaron las partes hace más de un año en la ciudad macedonia de Ohrid, pero que no han aplicado y que incluye la implementación de acuerdos pasados, como la creación de la asociación de municipios serbios en Kosovo.
Frente a la hoja de ruta acordada en Ohrid que busca dar forma a los pactos alcanzados los últimos años, la UE se ha visto empujada a mediar entre serbios y kosovares para resolver distintas disputas y polémicas que han ido surgiendo como la controversia por las matrículas o el uso del dinar.
La UE se centra en esta parte y así ha presentado una nueva propuesta para aplicar el plan acordado por Belgrado y Pristina, que según ha asegurado Borrell no ha podido ser avalado por la condiciones de Serbia y Kosovo a la aplicación de los acuerdos.
"Las posiciones de las partes siguen estando muy alejadas en cuanto a la forma de poner en marcha la aplicación del acuerdo y, por consiguiente, de continuar el proceso de normalización", ha resumido.
La UE viene insistiendo en que se acuerden los próximos paso en las conversaciones para normalizar relaciones y se avance en la aplicación de los acuerdos, una vez los cargos europeos se renovarán y tras la salida de Borrell pasarán a ser otros dirigentes los que faciliten el diálogo entre Serbia y Kosovo.
"Está claro que lo que se ha acordado debe aplicarse. Los acuerdos son la base de la acción, pero la acción tiene que seguir a los acuerdos", había indicado el Alto Representante en declaraciones antes del encuentro.