La UE eleva su respuesta humanitaria y moviliza 4,5 millones de euros para desplazados en Nagorno Karabaj

BRUSELAS, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea ha anunciado este martes que eleva su respuesta humanitaria a la crisis en Nagorno Karabaj con una nueva ayuda de 4,5 millones de euros para asistir a las personas desplazadas por el conflicto, tras la salida de 13.500 armenios de la región separatista.

En total, la ayuda se suma a los 500.000 euros de apoyo de emergencia desembolsados la semana pasada como primera respuesta a la crisis en el Cáucaso. Los cinco millones en total de ayuda humanitaria de la UE se destinarán a los desplazados por el conflicto y a las poblaciones vulnerables que siguen viviendo en el enclave.

"Tenemos que estar preparados para apoyar a las miles de personas que huyen de Nagorno Karabaj, especialmente mientras se aproxima el invierno y expondrá a los refugiados a retos añadidos", ha considerado el comisario de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, en un comunicado.

En todo caso ha defendido la reacción de la UE al "aumentar drásticamente" la ayuda humanitaria a la zona y dar respuesta de emergencia a las personas en necesidad tras los nuevos choques en Nagorno Karabaj.

Según reconoce la Comisión Europea en su comunicado, tras la escalada militar y el posterior alto el fuego se espera una "éxodo masivo" a Armenia de la población de Nagorno Karabaj, al tiempo que el enclave vive una situación de gran escasez de alimentos y acceso a la electricidad y el agua potable.

Las autoridades azeríes han sostenido en todo momento que su intención es que los habitantes de etnia armenia puedan permanecer en sus hogares y ha prometido respetar sus derechos, si bien ha señalado que los miembros de grupos armados proarmenios y de las Fuerzas Armadas armenias deberán entregar las armas y salir del país.

La región de Nagorno Karabaj es un territorio recuperado por Azerbaiyán tras su última ofensiva de la semana pasada. Hasta entonces la zona, de mayoría armenia, había estado más de tres décadas bajo control de fuerzas proarmenias pese a que la comunidad internacional reconocía la región como de soberanía azerí. En la zona viven unos 120.000 armenios.