BRUSELAS, 15 (EUROPA PRESS)
La Unión Europea está explorando la idea de crear un grupo de contacto para tratar de facilitar el diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana que permita romper el estancamiento actual a fin de tratar de llegar a una solución política a la crisis venezolana pero ha dejado claro este lunes que no contempla relajar las sanciones a Venezuela por la represión interna.
"Exploraremos la posibilidad de establecer un grupo de contacto para ver si se dan las condiciones para facilitar no una mediación, claramente no hay condiciones para eso (...), sino la facilitación de un proceso político", ha confirmado en rueda de prensa la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, al término del almuerzo de los jefes de la diplomacia de los Veintiocho, que han abordado cómo la Unión puede facilitar el diálogo en Venezuela a petición de España y otros países.
Mogherini ha justificado la idea porque para el bloque europeo "sólo puede haber una solución política democrática a la crisis actual en el país" y supondría "una manera de estar en contacto con diferentes partes, no solo en Gobierno, sino diferentes partes de la oposición, implicando a algunos actores regionales e internacionales", y explorar "la posibilidad de crear las condiciones para que comience un proceso de diálogo político".
"No quiero crear expectativas aquí. No hemos decidido constituirlo todavía, sino explorar la posibilidad de hacerlo", ha puntualizado sobre la idea de crear dicho grupo de contacto.
Se trata de una idea que ya avanzó la ministra de Exteriores sueca, Margot Wallström, en declaraciones a la prensa y fuentes diplomáticas han explicado a Europa Press que la idea de crear un grupo de contacto ya se abordó en la reunión informal de los jefes de la diplomacia europea, conocida como Gymnich.
SANCIONES POR VIOLACIONES DE LOS DDHH
Mogherini ha dejado claro, eso sí, que la Unión no relajará sus sanciones a Venezuela por violaciones de los Derechos Humanos.
"Hemos introducido sanciones dirigidas contra individuos que son responsables de violaciones de Derechos Humanos, principalmente derechos políticos. Esta política va a continuar", ha remachado, insistiendo en que "la UE no está mirando relajar su posición sobre Venezuela de ninguna manera" en este plano.
Mogherini ha incidido en que se trata de "ver si la Unión Europea puede jugar un papel útil con otros juntos e intentar impedir que la situación vaya de mal en peor o de peor a peor".
"Porque estamos preocupados de que en ausencia de un proceso político las tensiones sólo empeorarán la situación de la gente venezolana, entre ellas muchos cientos de miles de ciudadanos europeos", ha avisado la italiana, que ha insistido en que los europeos no quieren "sentarse a esperar que esto ocurra".
"Podemos intentar además de y sin perjuicio de (las sanciones de la UE a Venezuela) buscar alguna forma de facilitación, que no mediación de un diálogo, que hoy es inexistente porque no hay puntos de encuentro", ha agregado Borrell en una rueda de prensa al término de la reunión de los Veintiocho. "Lo cortés no quita lo valiente", ha remachado el jefe de la diplomacia española.
Respecto a la posibilidad de que el bloque module las sanciones a Venezuela en función de los avances en el diálogo, Borrell ha explicado que "no se ha entrado en este nivel de detalle" durante la discusión de los Veintiocho pero "muchos países consideran que hay que asociar ambas cosas".
"No se trata de cambiar la política y abandonar las sanciones sino de asociar las sanciones", es decir, "modularlas en función de las posibilidades que tenga la Unión de hacer algo más que aportar ayuda humanitaria", ha precisado el español.
PRESIÓN SOBRE VENEZUELA
Muchos países del bloque piden "no rebajar el nivel de presión" al régimen venezolano por el retroceso democrático y en materia de Derechos Humanos --el bloque ha sancionado a 18 altos cargos venezolanos y ha impuesto un embargo de armas y de equipos que puedan ser utilizados para la represión interna--, han explicado fuentes diplomáticas. Algunos países como Reino Unido incluso son partidarios de imponer "más sanciones" a Venezuela, una opción que de momento no está sobre la mesa, según varias fuentes diplomáticas.
La UE ha asegurado en reiteradas ocasiones que sus sanciones a Venezuela son "reversibles", algo condicionado a una mejora de la situación y ha instado a Caracas a negociar una solución política con la oposición, conforme a la Constitución venezolana, que "respete los Derechos Humanos" y libere a los presos políticos.
Borrell ha explicado que "todos" los países de la UE están "en contra" de ningún tipo de intervención militar en Venezuela y a favor de "explorar las posibilidades" de una facilitación del diálogo "sin saber muy bien si eso es posible y sin levantar ninguna expectativa de que pueda hacer creer que hay un cambio de política" y se ha encargado a Mogherni que prepare un texto de conclusiones sobre Venezuela para la próxima reunión de Exteriores.
"Vamos a intentar que eso sea posible y si no lo es, pues no lo es. No podemos hacer milagros pero tampoco deberíamos quedarnos indiferentes", ha remachado Borrell, que ha explicado que él y su colega portugués han informado de sus recientes contactos en Venezuela y ha recordado que "todos" los venezolanos piden una solución negociada.
Borrell también ha lamentado que la ayuda humanitaria europea para Venezuela no es acorde "a la magnitud del problema" sobre el terreno.