BRUSELAS, 20 (EUROPA PRESS)
El presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, y la Comisión Europea han advertido este martes al primer ministro británico, Boris Johnson, de que el plan de emergencia para la isla de Irlanda ('backstop' en la jerga comunitaria) es la única forma de evitar una frontera 'dura' entre Irlanda e Irlanda del Norte una vez que Reino Unido haya abandonado la UE.
"El 'backstop' es un seguro para evitar una frontera dura en la frontera de la isla de Irlanda mientras y hasta que no se encuentre otra alternativa. Aquellos que están en contra del 'backstop' y que no proponen alternativas realistas de hecho apoyan restablecer una frontera. Incluso si no lo admiten", ha escrito el polaco en Twitter.
En la misiva, Johnson critica la solución de emergencia para Irlanda por ser "antidemocrática e inconsistente" con la soberanía de Reino Unido, es "incoherente" con el deseo de Londres de tener una "relación sostenible a largo plazo" con el club comunitario y amenaza con "debilitar" el "delicado equilibrio" del Acuerdo de Viernes Santo.
En su lugar, propone al bloque sustituir el 'backstop' por "acuerdos alternativos" antes de que finalice el periodo de transición (que sólo existiría si la salida es ordenada) y reconoce que es necesario "un grado de confianza" entre ambas partes si tales soluciones alternativas "no están totalmente preparadas" para ese momento.
El Ejecutivo comunitario, por su parte, ha reaccionado justo después de que el presidente del Consejo europeo lanzara su mensaje de respuesta a la carta enviada por el primer ministro británico y ha subrayado que comparte su contenido.
"Tomamos nota de la carta del primer ministro Johnson. El presidente del Consejo europeo ha tuiteado una reacción inicial que compartimos", ha asegurado la portavoz de la Comisión Europea Natasha Bertaud.
Bruselas ha celebrado el "compromiso continuado" de Londres con lograr una salida "ordenada" del bloque comunitario, pero al mismo tiempo ha criticado que la misiva "no incluye una solución legal y operativa para evitar la vuelta de una frontera dura en la isla de Irlanda".
"No establece cuáles podrían ser otras soluciones alternativas. De hecho, reconoce que no hay una garantía de que estas soluciones no estarán preparadas para el final del periodo de transición", ha señalado la portavoz comunitaria.
Además, ha recordado que su posición sobre el llamado 'backstop' para Irlanda es "muy conocida" y ha defendido que esta solución es "la única forma identificada por ahora por las dos partes para honrar" el compromiso asumido en las negociaciones para el Brexit de evitar la reintroducción de una frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte.
En cualquier caso, ha garantizado que el Ejecutivo comunitario está "preparado" para trabajar "de forma constructiva con Reino Unido" siempre dentro del mandato negociador pactado por las capitales europeas y ha apuntado que el presidente de la institución, Jean-Claude Juncker, está disponible para tener una reunión bilateral aunque no ha recibido una petición formal en este sentido por parte de Londres.