La UE se compromete a acoger a refugiados en el país, pero sin concretar cifras
BRUSELAS, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea y Turquía han llegado a un acuerdo para reforzar su cooperación para responder a la crisis de refugiados a través de un plan de acción que prevé ayuda financiera europea para Ankara para cofinanciar seis nuevos centros de recepción de inmigración a cambio de que refuerce su cooperación con Grecia y Bulgaria para impedir la inmigración irregular, entre otros.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, "acordaron el principio de tener un plan de acción conjunto para reforzar la cooperación frente a la inmigración, con el objetivo de tener algo listo para el Consejo Europeo" de mediados de octubre, han explicado fuentes comunitarias. Una delegación del Ejecutivo comunitario se desplazará este miércoles a Ankara para discutir la puesta en marcha del plan.
El plan de acción contempla medidas a corto y medio plazo que deben dar ambas partes de forma simultánea para apoyar a los refugiados y las comunidades de acogida en Turquía y, en segundo lugar, reforzar la cooperación para impedir los flujos irregulares de inmigrantes a la UE a través del territorio turco, uno de los principales puntos de tránsito.
Así, Ankara se compromete a reforzar la capacidad de interceptación de sus guardacostas mejorando sus equipos de vigilancia y aumentando sus patrullas y operaciones de búsqueda y rescate y también se compromete a reforzar su cooperación con los guardacostas de Grecia y para readmitir a los inmigrantes irregulares que no tienen derecho a asilo interceptados por Rumanía, Grecia y Bulgaria que entraron a sus territorio procedentes de Turquía, en línea con las obligaciones de readmisión.
El plan de acción contempla que "deben abrirse más puntos para la transferencia de inmigrantes irregulares interceptados en el mar Egeo" y Ankara se compromete a "intensificar la cooperación con Frontex aplicando un acuerdo de trabajo".
AYUDA FINANCIERA
La UE se compromete por su parte a movilizar hasta 1.000 millones de euros en 2015 y 2016 para ayudar a Turquía, priorizando la ayuda humanitaria y el acceso a la educación y la empleabilidad de los 2,5 millones de refugiados siros e iraquíes que acoge Turquía, aunque los fondos y las áreas deben concretar todavía Bruselas y Ankara.
También se priorizará la cofinanciación de seis nuevos centros de recepción en Turquía ante la necesidad de garantizar "acomodación apropiada" para los refugiados.
La UE también abre la posibilidad a más ayudas para Turquía a través del Fondo Fiduciario de Siria de la UE, cuya dotación la Comisión ha propuesto elevar hasta los 500 millones y ha pedido una contribución equivalente a los Estados miembros.
La Comisión también apoyará a los Estados miembros para permitir la entrada legal de refugiados de Turquía a la UE a través de programas de reasentamiento. "El trabajo en un enfoque estructurado de la UE para el reasentamiento se intensificará", recoge el plan de acción.
La Comisión ha rechazado que haya planteado que los Estados miembros acojan a 500.000 refugiados en Turquía como aseguró un diario alemán 'Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung' aunque ve "modesto" el compromiso de los Veintiocho de acoger a 22.000 refugiados de terceros países de junio. "Nunca presentamos una cifra, las cifras se deben negociar ahora", han explicado fuentes comunitarias.
COMBATIR A LAS MAFIAS
La UE también se compromete a aumentar la ayuda financiera para apoyar a Turquía a desarrollar un sistema de asilo, inmigración, visa y gestión fronteriza integral, apoyará el refuerzo de la capacidad de Turquía para combatir a las redes que trafican, especialmente reforzando la capacidad de los guardacostas turcos y desplegando un oficial de enlace de Frontex a Turquía y a apoyar la organización de operaciones conjuntas de retorno de inmigrantes irregulares.
El Gobierno turco también se compromete a reforzar su cooperación con Bulgaria y Grecia para impedir la inmigración irregular a través de su frontera terrestre común y poner en marcha el centro conjunto acordado en mayo.
Las autoridades turcas también se comprometen a reforzar los requisitos de visados y las normas de residencia que aplica Turquía a nacionales de países que son potencialmente una fuente de inmigración irregular, tanto para Turquía como para la UE y a mejorar sus capacidades de análisis de datos para evaluar y gestionar mejor los flujos migratorios en su territorio.
Ankara también se compromete a reforzar la lucha contra las redes criminales que trafican con inmigrantes, a través del refuerzo de la cooperación "operativa" entre las autoridades policiales y judiciales turcas y de los Veintiocho y las agencias europeas, algo que mejorará su capacidad de "impedir a tiempo intentos de salida irregulares e investigar y desmantelar redes de traficantes". Los Estados miembros destinarán oficiales de enlace en Turquía, incluido en los aeropuertos, para intensificar la lucha contra estas redes e identificar antes el uso de documentos de viaje fraudulentos y la identidad real de los inmigrantes.
Igualmente, el Gobierno turco se compromete a aplicar la ley sobre extranjeros y la protección internacional y garantizar que los inmigrantes son registrados y procedimientos de asilo que permitan conceder el estatus de refugiado "sin retraso" para los casos "positivos", continuar promoviendo políticas y programas para la integración social de los refugiados en Turquía.