PARÍS, 15 Sep. (Reuters/EP) -
La revista satírica francesa 'Charlie Hebdo' ha generado polémica otra vez al publicar caricaturas burlándose de la respuesta de los países europeos predominantemente católicos a una ola de inmigrantes y refugiados en su mayoría de zonas musulmanas en conflicto como Siria e Irak.
El semanario se convirtió en un símbolo de libertad de expresión tras ser blanco de un ataque por parte de milicianos islamistas en enero por publicar caricaturas sobre el profeta Mahoma que se saldó con doce muertos, incluidos algunos de los principales caricaturistas de la publicación.
La edición más reciente también ha acaparado la atención del mundo, y muchas críticas en las redes sociales. Un dibujo se basa en la fotografía de Aylan Kurdi, el niño sirio que se ahogó y cuyo cuerpo terminó en una playa turca tras un fallido intento de su familia de cruzar el mar hacia Grecia. La imagen horrorizó al mundo.
La caricatura de 'Charlie Hebdo' muestra a un niño en shorts y una camiseta boca abajo en una costa al lado de un cartel publicitario que ofrece dos menús infantiles por el precio de uno. "Tan cerca de lograrlo...", dice el texto de la caricatura.
Otro dibujo, también realizado por un caricaturista que sobrevivió el ataque de enero, dice: "Prueba de que Europa es cristiana". La caricatura muestra una figura parecida a Jesús caminando sobre el agua mientras otra, una más pequeña vistiendo shorts está tumbada en el agua. El dibujo parecido a Jesús dice "Los cristianos caminan sobre el agua", mientras que la otra dice "Los niños musulmanes se hunden".
Periódicos desde Asia a Norteamérica han informado sobre las caricaturas y han criticado a la revista. Otros medios han evitado condenar al "enfant terrible" de la prensa francesa pero han insinuado que 'Charlie Hebdo' podría enfrentar problemas legales o de otro tipo por su último trabajo. Algunos medios también han sostenido que parecía que las caricaturas denunciaban la hipocresía y el consumismo en Europa.
Una portavoz de 'Charlie Hebdo' contactada por Reuters ha señalado que la revista no tiene conocimiento de ninguna queja presentada en su contra.
La revista recibió una muestra mundial de solidaridad tras el ataque de enero, en el que murieron su director y varios de sus caricaturistas, entre otras personas. El eslogan "Je Suis Charlie", o "Yo soy Charlie", se extendió por todo el mundo en manifestaciones y publicaciones.
Pero muchos usuarios de medios sociales expresaron su enojo y frustración sobre las nuevas caricaturas este martes, con la etiqueta en Twitter #JeNeSuisPasCharlie (Yo no soy Charlie).