Niños en una escuela infantil en Jersón. - Europa Press/Contacto/Nina Liashonok
MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha cifrado en unos 1.993 los niños heridos o muertos como consecuencia de la invasión rusa de Ucrania hace ahora algo más de dos años, lo que equivale a un promedio de dos víctimas al día.
"Como vemos en todas las guerras, las decisiones y acciones imprudentes de los adultos están costando a los niños la vida, la seguridad y el futuro", ha lamentado UNICEF, que alerta de que la cifra "probablemente sea mucho mayor".
"Más allá de los asesinatos de niños y los daños físicos causados por los ataques, otros muchos menores de edad en toda Ucrania han experimentado niveles de pérdida y violencia perjudiciales para su salud mental y su bienestar", señala.
UNICEF ha explicado que la mayoría de los adolescentes tienen problemas para dormir debido al estrés, mientras que uno de cada cinco menores tiene "pensamientos intrusivos". Todo ello marcado por otro año escolar interrumpido. "Casi un millón de niños no pueden acceder a ningún tipo de aprendizaje presencial", denuncia.
La rehabilitación de escuelas y refugios, así como la entrega de material escolar y de aprendizaje para que los pequeños puedan al menos continuar con sus estudios desde casa se ha convertido en una de las principales tareas de UNICEF.
Con todo, la agencia de Naciones Unidas ha señalado que necesitan unos 250 millones de dólares más para garantizar este apoyo a los niños y sus familias dentro de Ucrania, incluyendo zonas en la primera línea de los combates.
En 2023, la organización accedió a través de estas iniciativas a 1,3 millones de niños, así como a otros 2,5 millones de menores de edad y a sus progenitores y tutores para facilitarles acceso a servicios de salud mental y apoyo psicosocial.
"UNICEF sigue pidiendo un alto el fuego inmediato en Ucrania y que se proteja a todos los niños de cualquier daño. Esto incluye poner fin al uso brutal de armas explosivas en zonas pobladas y a los ataques a instalaciones e infraestructuras civiles que dañan de forma desproporcionada a los niños", reclama.
La pasada semana, la Fiscalía General de Ucrania cifró en 546 el número de menores de edad que han muerto como consecuencia de la invasión rusa, mientras que situó el número de heridos en unos 1.330, siendo las provincias de Donetsk y Járkov aquellas en las que se ha registrado mayor número de víctimas infantiles.