MADRID, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
El director ejecutivo del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Anthony Lake, ha condenado este lunes los bombardeos contra cuatro instalaciones médicas en Siria, dos de las cuales estaban apoyadas por la agencia.
"Al margen de las consideraciones diplomáticas y las obligaciones bajo el Derecho Humanitario, recordemos que estas víctimas son niños. Niños", ha subrayado, recordando que una de las instalaciones atacadas era un hospital materno-infantil.
Naciones Unidas ha denunciado la muerte de al menos 50 civiles en ataques contra hospitales y colegios en las provincias sirias de Alepo e Idlib, recordando que se trata de "una flagrante violación del Derecho Internacional".
Si bien el portavoz de la ONU, Farhan Haq, no ha detallado el balance, se sabe que al menos 23 civiles han fallecido por el impacto de misiles en tres hospitales y una escuela en localidades bajo control de los rebeldes.
Al menos catorce personas han muerto en la localidad de Azaz, en Alepo, por la caída de misiles en una escuela en la que se refugiaban familias que huyen de la ofensiva del Gobierno de Bashar al Assad y un hospital para niños, según han informado dos residentes y un médico.
Las bombas también han golpeado otro refugio para desplazados al sur de la localidad y un convoy de camiones, según otro residente. "Hemos estado trasladando a decenas de niños gritando del hospital", ha relatado el médico Juma Rahal, que ha precisado que al menos dos niños han muerto y decenas de personas han resultado heridas.
En otro incidente separado, varios misiles han impactado en otro hospital en la localidad de Marat al Numan, en la provincia de Idleb, según han denunciado el presidente de Médicos Sin Fronteras (MSF) Francia, Mego Terzian, que apoyaba al centro.
"Hubo al menos siete muertos entre el personal y los pacientes y al menos ocho miembros del personal de MSF han desaparecido y no sabemos si están vivos", ha dicho.
Los residentes locales han responsabilizado a los bombardeos rusos, denunciando que los aviones del Kremlin han sido más numerosos y las municiones más potentes que las empleadas normalmente por el Ejército sirio.
En cualquier caso, el portavoz de la ONU ha recalcado que "estos ataques son una flagrante violación del Derecho Internacional", apuntando además que "arrojan dudas sobre los compromisos asumidos por el Grupo Internacional de Apoyo a Siria (ISSG) durante la reunión del 11 de febrero en Múnich, donde se acordó una tregua.