UNICEF reclama 3.100 millones de dólares para ayudar a 62 millones de niños en 71 países

Solicita 1.000 millones de dólares más para que los menores puedan afrontar "una nueva generación de crisis humanitarias"

   MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha solicitado la aportación de 3.100 millones de dólares (unos 2.740 millones de euros) para prestar ayuda a 62 millones de niños que se encuentran en situación de riesgo por crisis humanitarias en 71 países.

   Esta petición aumenta en 1.000 millones de dólares (unos 880 millones de euros) la cantidad solicitada por la agencia de Naciones Unidas en 2014 y supone "el mayor llamamiento de emergencia" que ha realizado la organización en toda su historia, según ha explicado en rueda de prensa en Madrid el presidente del Comité Español de UNICEF, Carmelo Angulo.

   Con estos fondos, UNICEF tiene como objetivo tratar a 2,7 millones de niños contra la desnutrición aguda grave, vacunar a 13,6 millones de niños contra el sarampión, dar acceso a agua potable a 34,3 millones de personas, proteger a 2,3 millones de niños con apoyo psicosocial, contribuir a que unos cinco millones de niños reciban una educación, dar información y tratamientos contra el sida a 275.000 personas y aportar apoyo económico en efectivo a 395.000 personas. En cifras totales, la previsión es dar ayuda a 98 millones de personas en todo el mundo.

   Angulo ha explicado que la agencia de Naciones Unidas confía en lograr este año "resultados superiores" a los del año pasado porque "las cosas se han complicado mucho". A modo de ejemplo, ha recordado que en Siria, unos 100.000 niños están "atrapados bajo las bombas" y ha subrayado la complicada situación que viven los niños en los países de África Occidental que sufren el brote de ébola.

   El presidente del Comité Español de UNICEF ha advertido de que unos 16,7 millones de niños están viviendo en zonas de conflicto en países como la República Centroafricana, Irak, Palestina, Siria, Ucrania y Sudán del Sur, muchos de ellos como refugiados o desplazados. En total, unos 230 millones de niños en todo el mundo viven en países marcados por los conflictos.

   Siria se sitúa como el país que más fondos requiere de la petición internacional de UNICEF, que pide 903 millones de dólares para esta nación azotada por la guerra desde mediados de 2011 por los enfrentamientos entre las fuerzas del régimen que preside Bashar al Assad y los rebeldes y grupos terroristas como Estado Islámico y el Frente al Nusra.

   El llamamiento Incluye 500 millones de dólares para las comunidades afectadas por el ébola, un brote que dejado miles de muertos y a miles de niños huérfanos y expuestos al estigma que genera la enfermedad en la sociedad, incluidas sus propias familias.

   En el caso de Nigeria, un país marcado por la amenaza del grupo terrorista islamista Boko Haram, UNICEF pide 26,5 millones de dólares (23,4 millones de euros) para ayudar a los niños, mientras que en Ucrania, donde 1,7 millones de niños se ven afectados por el conflicto armado, la petición asciende a 32,45 millones de dólares (28,6 millones de euros).

   Angulo ha explicado que el llamamiento internacional también comprende la petición de ayuda para los llamados conflictos o crisis "olvidadas", en los que los civiles, adultos y niños, siguen sufriendo las consecuencias pero la comunidad internacional ya no presta la atención que precisan. En este apartado, UNICEF sitúa a Afganistán, Palestina y Níger.

BALANCE DE 2014

   En 2014, UNICEF dio apoyo humanitario a millones de niños en todo el mundo, incluyendo la vacunación de 16 millones de niños contra el sarampión, el tratamiento de 1,8 millones de niños contra las formas más graves de desnutrición, los servicios de apoyo psicológico a casi dos millones de niños y el abastecimiento de agua potable a trece millones de personas.

   En este contexto, dos millones de niños recibieron también una mejor educación, un elemento que UNICEF considera "crucial" en su respuesta de emergencia porque ayuda a restablecer la "normalidad" entre los niños y les ofrece "una esperanza para el futuro".

   El acto de presentación del informe de UNICEF en la Fundación Telefónica en Madrid ha contado con la participación por videoconferencia de Berta Travieso, la jefa de la Oficina de la agencia de Naciones Unidas en Zalhe (Líbano), que ha resaltado la importancia de todas las donaciones que recibe su organización y ha recordado que en ese país hay 1,14 millones de refugiados sirios distribuidos a lo largo de 840 campos pero también en campamentos improvisados. Del total de refugiados sirios, en torno a un 35 por ciento son niños y todos ellos sufren las dificultades de la vida del desplazado ante el duro invierno y las condiciones de pobreza en los campos.

DIFICULTADES EN LA DESMOVILIZACIÓN DE NIÑOS SOLDADO

   Desde Senegal, Pablo Pascual, especialista en Emergencias de la Oficina de UNICEF para África Central y Occidental, ha contado el complejo y largo proceso por el que pasan los niños soldado para lograr reintegrarse en la vida civil en República Centroafricana, con el apoyo de su organización.

   En este sentido, ha alertado de la inseguridad y las dificultades existentes para desmovilizar a los niños soldado por la gran cantidad de grupos y subgrupos de milicianos sin una cadena de mando efectiva y porque es muy difícil que los comandantes cumplan y dejen marchar a los menores de edad.

   Pascual ha asegurado que la región existen entre 6.000 y 10.000 niños "asociados" al conflicto en República Centroafricana, es decir, que son obligados a trabajar de una u otra manera con los grupos combatientes, ya sea como soldados, sirvientes o personal sometido a todo tipo de abusos, incluidos los sexuales. De esa cifra, unos 3.000 niños estarían trabajando como combatientes.

   El responsable de UNICEF ha relatado la historia de dos hermanos que fueron niños soldados y las dificultades para lograr reinsertarse en la sociedad tras haber perdido familia, amigos y escuela y estando marcados por el trauma de la guerra y la violencia.

   Preguntado por el acuerdo de alto el fuego al que han llegado los 'anti balaka' y Séléka en República Centroafricana, Pascual ha considerado que el pacto todavía "no ha tenido ninguna repercusión sobre el terreno" y ha advertido de que existen muchos "grupos" y "subgrupos" de combatientes, lo que hace "muy difícil" alcanzar pactos que se apliquen en todo el país.