MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) ha solicitado 415,4 millones de dólares (unos 383 millones de euros) para sufragar sus programas de ayuda en Siria y también los de aquellas personas huidas del conflicto sirio hacia Líbano y Jordania.
La comisionada adjunta de la agencia, Natalie Boucly, ha instado a no olvidar a las víctimas de una crisis que dura ya doce años. "Si bien el horror que se desarrolla en Gaza está consumiendo la mayor parte de nuestra atención, no deben pasarse por alto las necesidades humanitarias en otras áreas", ha advertido.
Pese a estas necesidades crecientes, los fondos se han reducido en los últimos años. En 2021, la UNRWA logró cubrir algo más de la mitad de la financiación, pero en 2022 el dinero recabado se redujo al 40 por ciento y en 2023 apenas llegó al 27 por ciento.
"La situación general de financiación de UNRWA sigue siendo precaria, especialmente teniendo en cuenta los desafíos que ha enfrentado desde que comenzó el conflicto en Gaza", ha reconocido Boucly, en alusión a los recortes anunciados por distintos gobiernos tras las acusaciones vertidas contra varios trabajadores de la organización.
"Dado que importantes déficits de financiación impiden su capacidad para implementar su mandato, UNRWA pronto tendrá dificultades para mantener el nivel de asistencia humanitaria que puede proporcionar, un nivel que ya es mínimo", ha señalado.