BRUSELAS, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
Varios países de la Unión Europea, entre ellos España, han reclamado la necesidad de regular a nivel europeo la importación de bienes culturales con el objetivo de impedir la entrada de patrimonio expoliado por grupos terroristas como el Estado Islámico de Siria e Irak y cortarles esta vía de financiación, la segunda mayor después de la venta de petróleo.
"En un mercado cada vez más global, la Unión Europea no sólo necesita una postura común en materia de exportación, sino que precisa también tener criterios uniformes en todo lo relativo a la importación. Solo de esta manera conseguiremos que el territorio de la Unión no sea un terreno fácil para introducir bienes procedentes de otros países" de forma ilícita, ha defendido el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo.
El comisario de Educación, Juventud y Cultural, Tibor Navracsics, ha recordado que "la UE ya ha prohibido la importación de bienes culturales de Siria e Irak" pero no existen "normas armonizadas" a nivel europeo sobre la importación de bienes de consumo, incluido culturales, a la UE, algo que se estudiará ahora a petición de "varios" países.
"Hay un vacío claro legal", ha admitido el comisario en rueda de prensa al término del debate público de los ministros de Educación y Cultura de los Veintiocho sobre el papel de la UE para combatir el tráfico ilegal y la destrucción del patrimonio cultural en zonas en conflicto como ocurre en Siria e Irak a manos del Estado Islámico.
La Comisión Europea lanzará un estudio y una evaluación de impacto "a principios de 2016" y presentarán a los Veintiocho sus resultados "en la segunda mitad del año que viene" con el objetivo de avanzar "si hay consenso" en "una legislación a nivel europeo", ha explicado el comisario. "Estudiaremos cuestiones fiscales, cuestiones de aduanas y el tamaño y volumen total del tráfico ilegal de bienes culturales", ha avanzado.
La ministra de la Cultura francesa, Fleur Pellerin, ha reclamado a sus homólogos la necesidad de "adoptar acciones" a la luz de la destrucción "sin precedentes" al patrimonio cultural en Siria e Irak a manos del Estado Islámico. "Es un auténtico atentado contra el conocimiento y una enorme pérdida para la humanidad", ha denunciado, al tiempo que ha recodado que el presidente del Museo del Louvre, Jean-Luc Martínez, ha elaborado un informe con 50 acciones para proteger el patrimonio cultural en zonas de conflicto, que se basan en tres ejes, el primero de ellos luchar contra el tráfico de estos bienes.
"En este momento mismo el Estado Islámico emite permisos de excavaciones e impone impuestos para la venta de bienes que circulan por los redes de blanqueo. Hay que impedir su circulación en Europa", ha defendido la ministra francesa, que ha recordado que éstas obras expoliadas "financiar a los grupos terroristas más sanguinarios".
Pellerin ha reclamado "dar una respuesta fuerte y eficaz" a nivel europeo transponiendo en el derecho comunitario "las resoluciones del Consejo de Seguridad que prohíben el transporte, el tránsito y el comercio del patrimonio cultural" e "instalar un control aduanero para la exportación de bienes culturales". "Y Francia cree que la Unión Europea debe dotarse de un reglamento para este tema", ha
Insistido.
La ministra de Cultura alemana, Monika Grütters, ha reclamado "medidas comunes" para la importación de bienes culturales para "comprobar fácilmente" su origen. "Tenemos una serie de norma comunes para la exportación pero no tenemos normas comunes normas comunes sólidas sobre la importación", ha lamentado.
Y ha puesto como ejemplo el caso alemán. "En el futuro hemos decidido que tan solo se podrán importar bienes culturales si cuentan con una documentación, un pasaporte del país de origen. De esta manera regulamos también cómo se importante los bienes culturales de terceros países", ha explicado, al tiempo que ha reclamado que la destrucción y el tráfico ilegal de estos bienes debe "juzgarse con toda la seriedad en la Unión Europea" en respuesta a "un ataque al patrimonio cultural mundial". Berlín también apuesta por "mejorar el retorno de los bienes que han entrado ilegalmente".
Los Veintiocho han abordado no sólo "condiciones marco más rigurosas sobre todo para la importación" sino también otras propuestas como "un mejor intercambio de información" sobre el tráfico ilícito y si hacen falta nuevos instrumentos "para la identificación de bienes en venta" en anticuarios, "formación para mejorar las agencias de aduanas", además de una "mejor cooperación internacional para la restitución de bienes" expoliados, ha explicado la ministra de Cultura de Luxemburgo, Maggy Nagel, cuyo país ejerce la presidencia de turno de la UE.
El comisario ha explicado que la UE ya está ayudando al Consejo Internacional de Museos a "establecer una base de datos" para combatir el tráfico ilícito de bienes culturales y también prevén "implicar, junto con la UNESCO, a los mercados de arte para que ellos también desempeñen su pleno papel para impedir el comercio ilícito de estos bienes".
La UE ya ha contribuido 2,7 millones de euros para un proyecto de la UNESCO para preservar el patrimonio cultural en Siria y colabora con el organismo internacional en la reconstrucción del patrimonio en Tombuctú (Malí).