BRUSELAS, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Pesca de la Unión Europea han alcanzado en la madrugada de este miércoles un acuerdo sobre el reparto de las posibilidades de pesca para la flota comunitaria en 2017, que incluye un recorte del 1,4 por ciento de la merluza sur para España, hasta las 6.731 toneladas, y del 23 por ciento para el jurel del Cantábrico, hasta las 11.890 toneladas.
Las reducciones finales en estos dos stocks, de especial interés para la flota española, contrasta con las propuestas planteadas por la Comisión Europea en ambos casos, que incluían una disminución de las capturas de merluza sur del 36 por ciento y del 45 por ciento en el caso del jurel del Cantábrico.
La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha mostrado en una rueda de prensa su satisfacción por los Totales Admisibles y Capturas (TAC) y cuotas adoptadas para el próximo año.
La responsable de la cartera de Pesca ha destacado que, tras una propuesta inicial del Ejecutivo comunitario que era "bastante decepcionante" y "lejos de ser aceptable", se ha conseguido un cuerdo que permite "estar contentos".
Según las cifras que ha aportado la ministra, el reparto de cuotas para 2017 supone un incremento total de 41.000 toneladas en las capturas para la flota española, que se traducen en un impacto en términos económicos de 44 millones de euros.
"La política impulsada por el Gobierno de España, basada en el mejor asesoramiento científico posible, en un control riguroso y en la defensa de un aprovechamiento sostenible de los recursos redunda en una mejora de la rentabilidad y en las condiciones de pesca para el sector español", ha insistido García Tejerina.
Las posibilidades de pesca para el próximo año adoptadas por los Veintiocho recogen una cuota de 1.069 toneladas para el gallo capturado en aguas ibéricas, que supone una disminución del 15 por ciento con respecto a 2016, y un recorte del 25 por ciento para las capturas de esta misma especie en caladeros del norte.
En el caso de la anchoa del Golfo de Vizcaya, la flota española podrá pescar la misma cantidad que en 2016 (29.700 toneladas), mientras aumentan un 17,7 por ciento las posibilidades de pesca de boquerón de aguas de Portugal y del Golfo de Cádiz, hasta las 5.978 toneladas.
También se incrementan las capturas de rape de aguas ibéricas (un 54 por ciento), de merluza norte (un 10,4 por ciento), de rayas de aguas ibéricas (un 10 por ciento), de jurel del sur de Galicia, Portugal y el Golfo de Cádiz (un 6,9 por ciento), de la bacaladilla de caladeros nacionales (un 72,9 por ciento) y de la cigala del Golfo de Vizcaya y del Gran Sol (un 6,7 por ciento y un 8,6 por ciento, respectivamente).
Los ministros también han acordado mantener las posibilidades de pesca para el rape capturado en el Gran Sol y en el mar de Irlanda, así como en el que se pesca en el Golfo de Vizcaya. Lo mismo sucede para el merlán y para todos los caladeros de abadejo.
Sin embargo, el texto acordado por los Veintiocho mantiene la eliminación total de las posibilidades de pesca de cigala del Cantábrico, que ya recogía la propuesta de la Comisión Europea.