Cuba y Bolivia también aplauden la decisión de Nicaragua y arremeten contra el "golpista" Almagro
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El ministro de Comunicación e Información de Venezuela, Freddy Ñáñez, ha indicado este viernes que la salida de Nicaragua de la Organización de Estados Americanos (OEA) es "legítima" y "necesaria" después de que Managua informara de que ha iniciado el proceso de retirada del organismo regional.
"La salida de Nicaragua de la OEA es legítima y también necesaria de cara a la defensa de su soberanía y autodeterminación. El papel injerencista del organismo mostró su peor faceta en el asedio contra Venezuela y el golpe en Bolivia", ha escrito el ministro en un mensaje compartido a través de su cuenta de Twitter.
Ñáñez también ha cuestionado si "se precipita el final de la OEA", a lo que ha respondido que "sí".
Otras naciones amigas también ha aplaudido la decisión de Nicaragua de querer salir de la OEA, es el caso de Cuba, cuyo ministro de Asuntos Exteriores, Bruno Rodríguez, ha calificado la decisión del Gobierno de Ortega como "una firme y digna respuesta a las maniobras" del secretario general, Luis Almagro, "en contubernio con Estados Unidos, para intentar interferir en las decisiones que competen al pueblo nicaragüense".
Por otro lado, Bolivia también se ha pronunciado al respecto, pero no a través del Gobierno del presidente, Luis Arce, sino mediante el exmandatario Evo Morales, quien ha aplaudido la "soberana y digna" determinación "del pueblo hermano de Nicaragua" para dejar una OEA que "el golpista" Almagro que ha convertido la organización en un "instrumento del intervencionismo, racismo, fascismo e imperialismo de Estados Unidos en América Latina".
En ese sentido, Morales ha aprovechado una vez más para recordar cómo Bolivia ya fue "víctima de la ingerencia de Almagro", usando la OEA "para justificar el golpe de Jeanine Áñez que saqueó al Estado y causó 38 muertes, centenares de heridos, detenidos y perseguidos".
"La OEA lejos de promover justicia y solidaridad, provoca crisis e inseguridad", ha denunciado Morales en su cuenta de Twitter.
El ministro de Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada, ha anunciado este viernes que el país ha iniciado de forma oficial el proceso de salida de la OEA ante lo que el Gobierno nicaragüense considera "continuas muestras de injerencia" en los asuntos internos del país. El presidente, Daniel Ortega, ha procedido a presentar al secretario de la organización, Luis Almagro, una denuncia por "intromisión" en los asuntos internos y el consiguiente deseo del país de "abandonar la entidad".
Después de los comicios celebrados el pasado domingo 7 de noviembre, entre acusaciones de fraude y críticas por la represión del Gobierno a la oposición y críticos, la OEA aprobó una resolución en la que declaraba "ilegítimas" las elecciones, llamando a una "evaluación colectiva inmediata" con el fin de "tomar las acciones apropiadas" respecto a Nicaragua.
Según la resolución, las elecciones presidenciales del domingo en Nicaragua "no fueron libres, justas ni transparentes y no tienen legitimidad democrática". El documento afirma además que las autoridades de Nicaragua han ignorado todas las recomendaciones de la organización.
Precisamente fue Venezuela el primer país de la historia de la OEA que salió de la organización, a quien acusó de "intervencionismo" por haber convocado una reunión de ministros de Exteriores para abordar la situación en el país. La denuncia a la Carta Democrática --procedimiento por el cual un país sale de la OEA-- se produjo en 2017.
El artículo 148 de la carta contempla un periodo de dos años desde la denuncia hasta que se hace efectiva la salida. No obstante, en el caso de Venezuela, la OEA no reconoció el segundo mandato de Nicolás Maduro y dio su respaldo al opositor Juan Guaidó como presidente, lo que truncó el proceso de retirada venezolano.
Guaidó, autoproclamado presidente, envió entonces una carta al secretario general de la OEA, Luis Almagro, para comunicarle que "formalmente la decisión del Estado venezolano" de dejar sin efecto la denuncia de la carta enviada por Maduro.
Las otras grandes perturbaciones que ha enfrentado la OEA han sido la suspensión de Cuba y Honduras. En el caso del primero, todavía no ha regresado al organismo, mientras que Honduras, suspendido tras el golpe de Estado contra Manuel Zelaya en 2009, fue reinstaurado dos años después.