MADRID, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, ha anunciado este martes que el país ha solicitado a Naciones Unidas, entre otras organizaciones, que envíe observadores internacionales a las elecciones presidenciales previstas para el próximo 22 de abril, una de las principales demandas de la oposición.
"Venezuela ha invitado a organismos multilaterales como la ONU, Caricom, UNASUR o la Unión africana para que acompañen el proceso de las elecciones presidenciales y sean garantes de la transparencia y seguridad del sistema electoral", ha escrito el Ministerio de Exteriores en Twitter, citando a Arreaza.
Las autoridades venezolanas ya habían informado de que habían extendido una invitación a la Comunidad de Estados del Caribe y a UNASUR para que "acompañara" las elecciones presidenciales, si bien la inclusión de Naciones Unidas, la Unión de Naciones Suramericanas y la Unión Africana, a las que ha señalado Arreaza, es una novedad.
La Mesa de Unidad Democrática (MUD) ha reclamado al Gobierno, entre otras cuestiones, que la cita electoral cuente con una observación electoral independiente, más allá de las organizaciones alineadas con la corriente 'bolivariana'. En concreto, había pedido misiones de la ONU, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la UE.
La coalición opositora no participará en la contienda del 22 de abril porque considera que no hay garantías suficientes. La MUD ha exigido, además de la observación internacional, retrasar la fecha y levantar el veto sobre la propia MUD y algunos de sus partidos.
El Gobierno, en cambio, defiende que estas elecciones servirán para zanjar la crisis que arrastra el país desde la muerte de Hugo Chávez, en 2013, y pretendía incluso hacer coincidir las presidenciales con las parlamentarias, aunque estas últimas no están previstas hasta 2020.
En este contexto, Arreaza ha enfatizado que "el diálogo es la única vía para la paz". No obstante, se ha roto por la negativa del Ejecutivo a incluir en el acuerdo final las reivindicaciones de la MUD en relación con el proceso electoral.
"GUERRA ECONÓMICA"
Por otro lado, Arreaza, que ha comparecido en la 37º sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, ha acusado a Estados Unidos de "hacer más difícil" que Venezuela renegocie su deuda pública y lo ha enmarcado en la supuesta "guerra económica" contra la nación caribeña.
"La renegociación de la deuda externa va en marcha, pero la han hecho más difícil las sanciones de Estados Unidos", ha denunciado en rueda de prensa. Venezuela acumula una deuda de 1.900 millones de dólares y desde noviembre trata de llegar a un acuerdo con sus acreedores.
El bloqueo estadounidense, ha reprochado, ha afectado también a otros aspectos de las finanzas venezolanas. "La banca internacional ha reaccionado con pánico porque si un banco del mundo trabaja con Venezuela siente que lo van a sancionar", ha afirmado.
El jefe de la diplomacia venezolana ha defendido que, "ante las sanciones imperiales, el Gobierno bolivariano haya implementado y trabajado en nuevas rutas con Rusia, China y Turquía para la estabilización económica" del país.
Arreaza ha lamentado que, en general, hay una "campaña internacional" contra Venezuela y ha incluido en ella al Consejo de Derechos Humanos por elaborar "informes sesgados", en los que la ONU denuncia el excesivo uso de la fuerza contra manifestantes y otros abusos.