MANILA 15 Mar. (Reuters/EP) -
La vicepresidenta de Filipinas, Leni Robredo, ha criticado la guerra contra las drogas del presidente, Rodrigo Duterte, describiéndola como un problema de salud pública que no puede resolverse "sólo con balas".
En un vídeo enviado a Naciones Unidas para la reunión anual de la Comisión de las Drogas, que se celebrará este jueves en Ginebra, Robredo ha definido las muertes de las víctimas de la represión de Duterte como "ejecuciones sumarias".
"El número de muertes relacionadas con las drogas sigue aumentado", ha lamentado la vicepresidenta en el vídeo. "Desde julio de 2016, más de 7.000 personas han muerto en ejecuciones sumarias. Nuestra gente necesita un ambiente seguro", ha advertido.
Robredo, una abogada y activista social, ha asegurado que los filipinos deben pedir una mayor transparencia en la guerra contra las drogas y cuestionar el uso de las mismas por parte de Duterte.
"Nuestros líderes deben ser honestos en cuanto a las bases de la guerra contra las drogas y sobre cuál es exactamente el problema de las drogas", ha señalado, añadiendo que el problema está relacionado con la pobreza y la desigualdad.
Muchas de las críticas realizadas por Robredo han sido ridiculizadas y desacreditadas por Duterte y sus seguidores en reiteradas ocasiones. La vicepresidenta pertenece a otro partido político y no fue elegida por Duterte, ya que en Filipinas los vicepresidentes son elegidos por separado.
A su llegada al Gobierno, el pasado 30 de junio, Duterte puso en marcha una campaña antidrogas que se ha saldado con más de 8.000 muertes, de las cuales 2.500 murieron durante operaciones policiales.