La vicepresidenta de Filipinas deja su cargo en el gabinete por diferencias con Duterte

MANILA 4 Dic. (Reuters/EP) -

La vicepresidenta de Filipinas, Leni Robredo, ha anunciado este domingo que dimitirá de su puesto en el gabinete, citando "grandes diferencias" con el presidente Rodrigo Duterte y la sospecha de que hay un complot en marcha para apartarla de su puesto como 'número dos'.

Robredo se niega a dimitir como vicepresidenta pero ha dicho que dejará el cargo de ministra de Vivienda tras recibir un mensaje de texto de otro ministro que le decía en nombre de Duterte que "deje de acudir a todas las reuniones del gabinete" a partir del lunes. En Filipinas, el vicepresidente y el presidente son elegidos en elecciones separadas y Robredo no era compañera de fórmula de Duterte.

"He sido advertida de un complot para robarme la vicepresidencia. He optado por ignorarlo y centrarme en el trabajo", ha señalado en un comunicado. "Pero los acontecimientos de los últimos días indican que este complot se está poniendo en marcha", ha añadido, citando su exclusión del gabinete como la última gota.

Robredo no ha dado más detalles sobre el supuesto complot. El ministro Jun Evasco ha confirmado en una entrevista en una emisora que envió el mensaje de texto, citando las "diferencias irreconciliables" de Robredo con Duterte.

La vicepresidenta ha dicho que se ha enfrentado con Duterte por sus políticas, incluida su guerra contra las drogas, en la que han muerto más de 2.000 personas en los últimos cinco meses, y su intención de reinstaurar la pena de muerte.

Robredo, una antigua abogada y activista social de 52 años, ha dicho que entró en el gabinete porque creía que ayudar a los pobres era algo en lo que ella y Duterte podrían estar de acuerdo. "Desde el principio, el presidente y yo tuvimos grandes diferencias en principios y valores", ha añadido.

La vicepresidenta procede del partido del anterior presidente, Benigno Aquino, y derrotó por un escaso margen a Ferdinand Marcos Jr, hijo del difunto dictador del mismo nombre derrocado en una revuelta en 1986.

Su elección en mayo se vio marcada por las denuncias de Marcos de que el recuento había sido manipulado para garantizar que el Partido Liberal de Robredo tenía presencia en el ejecutivo de Duterte.